El Ayuntamiento de Barcelona está instalando esta semana bolardos en varios puntos de La Rambla como una de las medidas de seguridad acordadas en materia antiterrorista por la Junta Local de Seguridad.

Este miércoles los operarios están colocando pilas a la parte superior del paseo, la más próxima a Plaza Catalunya, por la cual entró el vehículo empleado para perpetrar la masacre del 17 de agosto.

Se trata de unos pilares cilíndricos oscuros mayores que los que habitualmente se instalan en la vía para impedir el paso de tráfico rodado.

Medidas para combatir el terrorismo

La Junta Local de Seguridad de Barcelona acordó en noviembre adoptar nuevas medidas en materia antiterrorista como peatonalizar las calles del entorno de la Sagrada Familia y la instalación de pilones flexibles y otros obstáculos provisionales en zonas céntricas.

A la Junta se decidió colocar en varias partes del centro de la ciudad obstáculos provisionales, además de los bolardos flexibles provisionales: arbolado, jardineras y cubos de hormigón.

Estas medidas fueron aprobadas en el marco del grupo específico creado por la Junta a raíz de los atentados del 17 de agosto a La Rambla con el objetivo de analizar riesgos y valoraron la adopción de medidas adicionales de seguridad.

Este grupo específico lo integran las áreas de Seguridad, Prevención, Urbanismo, Movilidad, Distritos y Turismo del Ayuntamiento de Barcelona, la Guardia Urbana, los Bomberos, los Mossos D'Esquadra, la Policía Nacional y la Guardia Civil.