El Port de Barcelona ha acusado al Ayuntamiento de "manipulación" por los datos sobre las emisiones de CO2 y le ha pedido que rectifique. En un comunicado, ha asegurado que las emisiones directas e indirectas de CO2 de la actividad portuaria representan unas 315.000 toneladas anuales, cifra que queda "muy lejos" de las más de 5,3 millones de toneladas que sostiene el consistorio.

El Port ha asegurado que el cálculo lo ha hecho "siguiendo las metodologías aceptadas por los expertos a nivel internacional". Según estos "primeros cálculos", de las 315.000 toneladas anuales de CO2, 215.000 provienen de los barcos, 80.000 del consumo eléctrico de las instalaciones del recinto portuario y las 20.000 restantes de las emisiones de vehículos, tanto ligeros como pesados, maquinaria e industria.

Según el Port, "emite 10 veces menos CO2 que la ciudad de Barcelona, que, según datos del Ayuntamiento, emite anualmente 3.413.260 millones de toneladas de CO2".

Diferencias de cálculo

La infraestructura ha rebatido los cálculos del consistorio porque suman todos los viajes que hacen en sus rutas marítimas internacionales los barcos de contenedores, ferris y cruceros que han operado en un año alguna vez en el puerto. Así, ha rechazado que se atribuya al recinto portuario de la capital "las emisiones de CO2 que un barco portacontenedores emite, pongamos por caso, cuando atraviesa el canal de Suez o cuando escala en los puertos del Extremo Oriente".

Ha defendido que el Port computa las emisiones generadas por un barco "mientras está en Barcelona", pero ha reivindicado que "ningún método de cálculo riguroso puede atribuir a un solo puerto las emisiones de toda la ruta que hacen los barcos que escalan".

En la gráfica que acompañaba las explicaciones del Ayuntamiento, el Port ha reivindicado que sólo serían atribuibles al puerto las emisiones "correspondientes a las actividades portuarias", que ocupan el 6,3% de toda la columna que el consistorio le atribuía. Ha añadido que el mismo ayuntamiento reconoce que las emisiones del puerto representan el 8% del total en Barcelona. "Es decir, las emisiones de CO2 en Barcelona derivadas de la actividad portuaria son notablemente inferiores a las emisiones totales de la ciudad", ha afirmado.

Las medidas del Port

El Port ha asegurado que tiene "un compromiso firme con la sostenibilidad, tanto medioambiental como económica y social" que los ha llevado a impulsar "numerosos proyectos para descarbonizar la actividad y reducir a mínimos las emisiones perjudiciales para la salud de los ciudadanos". En este sentido, ha indicado que la estrategia a favor del transporte ferroviario y del marítimo de corta duración ha permitido reducir un 76% los impactos negativos, como la contaminación y el ruido, con respecto a lo que habría supuesto el mismo volumen de carga transportado por carretera.

Por último, ha asegurado que ya trabajaba "desde hace tiempo en todas las demandas que el Ayuntamiento de Barcelona hizo ayer" en relación a más sostenibilidad con la electrificación de muelles, la generación de energía renovable fotovoltaica y eólica o la incorporación de planes de reducción de emisiones en los planes de futuro del Port, entre otros.

Así, ha asegurado que está en disposición de alcanzar en el 2030 la reducción de como mínimo el 50% de emisiones de gases efecto invernadero directos e indirectos. Con todo, el Port ha reclamado al consistorio barcelonés una rectificación porque "está poniendo en cuestión una actividad que genera 41.000 puestos de trabajo y el 1,7% del PIB de Catalunya".