El Park Güell ha experimentado una reducción drástica de visitantes, que han bajado más de la mitad en la comparativa de datos de 2022 con los años previos a la pandemia, como 2019. Si antes de la covid los visitantes a este parque que combina naturaleza con patrimonio arquitectónico de Gaudí era de 9 millones, el año pasado, ya sin restricciones por el coronavirus, fue de 4,6 millones. Una cifra que el Ayuntamiento de Barcelona ha vendido como un éxito de "desmasificación" que facilita el acceso a los vecinos y barceloneses en general, pero que tiene una explicación en el cambio del sistema de acceso de pago.

Lisa y llanamente, hasta 2019 solo se pagaba entrada para acceder a la zona central patrimonial, es decir, la entrada principal, la plaza de la Naturaleza, la sala hipóstila, el pórtico de la Lavandera y la escalinata del Dragón, mientras que el resto de la zona era de libre acceso universal, sin distinción entre vecinos —que podían acceder a la zona central previa identificación— y turistas, mientras que actualmente todo el recinto del Park Güell es de entrada de pago, excepto para vecinos que lo acrediten y usuarios de la tarjeta Gaudir Més, que se puede tramitar a través del Ayuntamiento de Barcelona.

A efectos numéricos, eso quiere decir que en 2019 entraron a la zona de pago 3,5 millones de visitantes, casi al límite de su capacidad, ya que se trata de un espacio de poco más de una hectárea, a los cuales hay que sumar 5,5 millones más que entraban en el resto del recinto, que en total comprende 12 hectáreas, llegando así a los 9 millones totales, según ha indicado el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica y de Gràcia, Eloi Badia que ha indicado que con la salida de la pandemia, el gobierno municipal se fijó tres objetivos, "reducir el turismo, devolver la actividad vecinal y preservar el patrimonio".

Así, con datos del 2022 dados a conocer este jueves por Badia, el año pasado visitaron 4,65 millones de personas, de los cuales 4,2 pagaron entrada y el resto, 450.000, fueron vecinos de los barrios adyacentes y usuarios del servicio Gaudir Més. Es decir, aunque se han vendido 700.000 entradas más, se ha conseguido reducir a la mitad a los visitantes. Eso sí, al precio de no ofrecer ninguna alternativa a los visitantes que se encuentran sin entrada, que antes al menos podían pasear por la zona adyacente. En todo caso, el gobierno municipal considera que todo ello ha servido para "reducir enormemente la presión".

Inversión de 16 millones

Asimismo, Badia ha anunciado una inversión de 16 millones de euros hasta el 2026 en nuevas actuaciones destinadas a mejorar el recinto, los entornos y la movilidad y para preservar su patrimonio arquitectónico y natural. Algunas de las actuaciones previstas en los entornos son la adquisición del edificio de la sede de la asociación vecinal y cultural La Miranda, la financiación de parte de las obras de mejora de las calles de Miquel dels Sants Oliver y Albert Llanas, la urbanización de Coll del Portell, la construcción del nuevo parque Font del Carbó y las urbanizaciones del Torrent del Remei, entre otros. Estas acciones se enmarcan en el Plan Estratégico del Park Güell, que tendrá continuidad hasta el año 2026 y coincidirá con los actos de conmemoración del centenario de muerte de Antoni Gaudí y del inicio de la apertura del parque como recinto público.

Además, con el fin de mejorar el recinto, también está en marcha la ejecución del Plan Director de conservación y mantenimiento y del Plan director de infraestructuras y servicios para la conservación del patrimonio natural y arquitectónico del parque, que aportará más y mejores infraestructuras como la renovación del alumbrado por uno más eficiente que cubra zonas hasta ahora poco iluminadas, siguiendo las propuestas recogidas por el vecindario y sin perjudicar la biodiversidad del parque. Se ha apostado igualmente por el incremento de su uso social con el impulso de iniciativas para consolidar el espacio como un recinto cultural para entidades y escuelas de los barrios del entorno y con la puesta en marcha de un nuevo discurso museográfico, entre otras actuaciones. En esta línea, durante 2022 se organizaron más de una veintena de actividades culturales temáticas en las cuales participaron cerca de 8.000 personas, lo que supone un incremento de más del 50% respecto de años anteriores.

Además, a partir de la reapertura del parque después de su cierre por la pandemia, el verano de 2020, se aplicaron medidas para limitar la capacidad de carga del recinto, se amplió la superficie regulada y se establecieron franjas de acceso exclusivas para vecinos y vecinas, la "Bon dia Barcelona" y la "Bon vespre Barcelona". El horario de apertura de las puertas del Park es a las 7 h de la mañana, y es a partir de esta hora y hasta las 9:30 h, cuando empieza la franja "Bon dia Barcelona". El horario de visitantes finaliza a las 20 h, y es cuando se inicia la franja "Bona nit Barcelona", un espacio de tiempo hasta las 22 h.