La inmobiliaria MK Premium presentó el pasado 3 de abril una demanda contra la concejala de Ciutat Vella de Barcelona, Gala Pin, por injurias y calumnias, en concreto por haber acusado a la empresa de coaccionar inquilinos de sus fincas. La compañía se refiere a diferentes declaraciones y comentarios en las redes sociales por parte de Pin, que habla de "violencia inmobiliaria", de prácticas de "matones de billetera" y de coacciones contra los vecinos de un edificio en la calle Lancaster.

MK Premium también pide a la alcaldesa, Ada Colau, que se retracte de un escrito en su Facebook donde asegura que esta empresa practica "acoso inmobiliario", y no descarta emprender medidas legales contra ella. De hecho, MK Premium asegura que si la actitud "reiterada y hostil" de los representantes del consistorio con el sector continua, grandes empresas privadas se están planteando una segunda demanda "conjunta e histórica".

La compañía defiende que adquirió el edificio de la calle Lancaster y resolvió todos los contratos de alquiler de forma amistosa, excepto uno. En este sentido, considera que las acusaciones de Pin de coacción son "muy graves, tendenciosas e infundadas". La decisión de presentar la demanda, paso previo a la interposición de una querella criminal, se produce ante las manifestaciones "reiteradas, desproporcionadas y lesivas" contra MK Premium, tanto en las redes sociales como en el programa Els Matins de TV3, remarca la inmobiliaria en un comunicado, donde considera que Pin ha querido "dañar gravemente su reputación e imagen, perjudicando gravemente sus intereses económicos".

Con respecto a Colau, la empresa le pide que se retracte de un escrito que publicó el 30 de marzo, donde se refiere al cara a cara que mantuvo en TV3 su concejala y un representante de MK Premium, refiriéndose a esta como una "empresa inmobiliaria que en los últimos días ha protagonizado un mediático caso de acoso inmobiliario por vaciar de inquilinos un edificio del barrio del Raval". También califica al portavoz de la compañía de "arrogante" y critica su "paternalismo machista". Los servicios jurídicos de la inmobiliaria han hecho la petición expresa para que la alcaldesa retire sus palabras y no descartan emprender acciones judiciales.