"Clara intromisión y competencia desleal". Así ha tildado el Sector de Crematorios de Animales de Compañía de Catalunya el proyecto del Ayuntamiento de Barcelona de impulsar un nuevo servicio de cremación e inhumación de cenizas para animales de compañía, anunciado por el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica y presidente de Cementerios de Barcelona, Eloi Badia, la semana pasada. Por medio de un comunicado, el colectivo que aglutina el sector privado dedicado a la cremación de animales de compañía ha querido expresar su "indignación" ante la iniciativa del gobierno municipal de Barcelona además de su "profundo malestar" por lo que supone entrar a competir con un sector que "lleva más de 20 años desarrollando su labor".

"Queremos recordar que el servicio que ofrecemos es fundamental para muchas familias que, después de la pérdida de su mascota, buscan una forma digna y respetuosa de despedirse de ellos", añaden, para denunciar que el Ayuntamiento de Barcelona haya decidido intervenir en este sector "sin previo aviso, sin dialogar con los profesionales del sector y sin tener en cuenta las necesidades de las familias que recurren a nuestros servicios" y aseguran que la voluntad de dar un servicio de "mayor vinculación" por parte del gobierno municipal "está completamente satisfecho desde hace años desde el sector privado". En este sentido, recuerdan que actualmente el sector privado ya ofrece "servicios de incineración colectiva, incineración individual e incineración individual presencial (con acceso a salas de velatorio propias) a los ciudadanos de Barcelona", tanto en centros de la ciudad como en los municipios próximos.

Por todo ello, el Sector de Crematorios de Animales de Compañía de Catalunya requiere al Ayuntamiento que "reconsidere su iniciativa y que antes de llevarla a cabo dialogue con las empresas del sector", a más de "recalcar que muchas familias y personas vivimos de este sector y llegado el momento, en caso de que fuera necesario, defenderemos los derechos de nuestro colectivo". Hay que recordar que, según dio a conocer el Ayuntamiento de Barcelona el 13 de marzo, el consistorio decidió activar esta iniciativa después de que Cementiris de Barcelona realizara un estudio de viabilidad del servicio que habría corroborado que existe una demanda no satisfecha con respecto a la cremación de animales de compañía.

Servicio público pionero

De hecho, el mismo consistorio admitió que actualmente este tipo de servicios se ofrecen desde el sector privado, de manera que Barcelona sería pionera al ofrecerlos como servicio público, con un coste aproximado de 200 euros por cremación. En este sentido, Badia apuntó que el nuevo servicio podría estar en marcha en unos "dieciocho meses", ya que habrá que instalar un crematorio específico, dado que el tratamiento de los restos de animales de compañía, así como los posibles columbarios, serían siempre servicios diferenciados de los que se ofrecen a los seres humanos. En principio, se trabaja con que este nuevo crematorio y los espacios para depositar las cenizas estén ubicados en localizaciones diferenciadas dentro de los cementerios de Collserola o de Montjuïc.