El posicionamiento del Ayuntamiento de Barcelona contra el aumento del sector turístico, a pesar de ser un polo de atracción y creación de negocio, es un tema de amplio debate en todos los sectores de la ciudad. La misma semana pasada, la alcaldesa, Ada Colau, pidió, y no es la primera vez, que se limite la llegada de cruceros al puerto de Barcelona bajo el argumento que son nodos de contaminación. Ante este hecho, la Comisión de Turismo de Foment del Treball ha dado a conocer este martes un manifiesto con un mensaje claro y conciso dirigido a la alcaldesa: "Deje de ir contra el sector turístico".

La gota que ha colmado el vaso para Foment ha sido lo que tildan de "la última ocurrencia de la alcaldesa de Barcelona", que es la de "querer limitar los cruceros en nuestro puerto porque generan polución y molestias en la ciudad". Ante esta situación, la comisión de turismo ha apuntado que todas las partes implicadas tienen que consensuar un modelo turístico que pase por la sostenibilidad, pero aclarando que desde la patronal están "cansados de debates poco profundos y de mantras que se han generado que son totalmente falsos", en especial con respecto a la reducción de cruceros.

Con respecto a la contaminación generada por los cruceros, Foment apunta que tanto las navieras como el puerto de Barcelona "están trabajando para reducir este impacto hasta conseguir que en unos años sea neutro en carbono, con el uso de combustibles menos contaminantes, de baterías eléctricas cuando se acercan a puerto, o con la electrificación de los muelles, de manera que cuando estén atracados no emitan emisiones". Además, apuntan que un estudio de la Universitat Rovira i Virgili cifra en "un 3% el peso máximo de las emisiones globales del área metropolitana". Igualmente, recuerda que parte de los usuarios de cruceros "aprovechan el viaje para, antes de zarpar o al desembarcar, pernoctar varios días en nuestra ciudad".

Por eso, indican, "el perfil de estos turistas tiene, en general, un alto poder adquisitivo y su consumo de bienes y servicios en comercios, restaurantes, hoteles o transporte", genera "una riqueza y un dinamismo para la economía de la ciudad y de su área metropolitana". Además, apuntan que "muchos pequeños y grandes empresarios del sector también somos ciudadanos de Barcelona y queremos lo mejor para nuestra ciudad y para sus ciudadanos" y por eso tienen como objetivo la generación de "más puestos de trabajo, que se distribuya la riqueza, que disminuyan las desigualdades sociales, que la calidad del aire sea la óptima para nuestra salud,", y concluyen que "las recetas que propone la alcaldesa de Barcelona no van en esta dirección".

"El decrecimiento ataca frontalmente el estado del bienestar y la distribución de la riqueza", apunta el manifiesto, claramente contrario a los postulados de Colau, y por eso apunta que "si queremos incrementar sueldos en el sector es esencial que vengan turistas y no al revés". "Manifestamos nuevamente que se deje de utilizar políticamente al sector, que no caigamos en contradicciones con respecto a los retos consensuados, y admitamos que somos una ciudad turística, y que es uno de los sectores que compite en los rankings mundiales con otras ciudades de gran envergadura", concluye la patronal.