El suicidio de un vecino el pasado lunes en el marco de un desahucio impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona ha sublevado al barrio del Bon Pastor, en el distrito de Sant Andreu de Barcelona, donde este miércoles por la noche un centenar de vecinos ha dirigido palabras muy duras al gobierno municipal encabezado por la alcaldesa, Ada Colau, y también a Lucía Martín, concejala de vivienda y también de Sant Andreu que el martes fue la encargada de dar la versión municipal y justificó el desahucio aduciendo que el vecino, Alberto, de 59 años, hacía un uso fraudulento del piso donde residía, que pertenece al parque municipal de vivienda pública.

Bajo el lema 'No son suicidios, son asesinatos', la portavoz vecinal que ha tomado la palabra lo ha dejado bien claro, dirigiéndose a los responsables municipales: "Acusamos a las administraciones del asesinato de Alberto, sois los responsables y lo sabéis". "No podemos normalizar esta situación", ha asegurado, para exigir que la concejala Lucía Martín "se disculpe por una rueda de prensa que nos pareció vergonzosa". De hecho, ha acusado a Martín de "mentir y falsear" la situación de Alberto, una circunstancia que, según su opinión, "la deslegitima en su cargo y su trabajo". "No intentéis engañarnos, no somos idiotas", ha soltado entre aplausos.

De hecho, en el turno abierto de palabra todavía se ha ido más lejos y se ha dejado claro que los vecinos reclaman la dimisión de Lucía Martín. "Es lo único que puede hacer", ha afirmado un vecino indignado, entre gritos de 'quien siembra miseria, recoge la rabia' y 'nosotros por los muertos, vosotros por el dinero'. El homenaje al vecino suicidado ha incluido un minuto de silencio y proclamas como "ningún motivo justificará su asesinato" entre gritos de "dimisión" dirigidos a la concejala Martín. Otro de los parlamentos ha puesto el dedo en la llaga de la paradoja en que se ha situado el gobierno municipal, cuando los ha definido como "la casta política que venía a salvarnos".

La versión municipal

Las declaraciones de Lucía Martín del martes han sido consideradas de "vergonzosas" para los vecinos porque la concejala admitió que el desahucio fue instado por el mismo consistorio, pero justificó que no era por un caso de impago -aunque no pagaba alquiler desde el 2018- sino porque "había problemas de convivencia y un uso fraudulento de la vivienda". "En el parque público de viviendas de Barcelona no presentamos nunca demandas por impago", afirmó Martín, ya que la política del gobierno pasa por "primar las situaciones de dificultad". En todo caso, los vecinos del Buen Pastor no lo ven así. Y probablemente a las elecciones de mayo del 2023, todavía lo vean igual.