El gobierno municipal de Barcelona ha presentado este viernes las grandes líneas de su propuesta de presupuesto para el 2020, unas cuentas que crecen, respecto a la prórroga presupuestaria actual, un 9,2% entre los ingresos y un 9,5% en los gastos, y se sitúan hasta los 2.898 millones de euros.

En una rueda de prensa, la concejala de Hacienda, Montserrat Ballarín, ha propuesto un incremento medio del IBI del 5,46% y calcula que con este encarecimiento el Ayuntamiento ingresará 43 millones de euros más.

Por poner un ejemplo, Ballarín ha especificado que un piso de 85 metros cuadrados con un valor catastral de 57.000 euros podía pagar 40 euros más de IBI al año que un piso de 103 metros cuadrados y 70.000 euros de valor catastral.

Ballarín ha asegurado que "a muchos le bajará'', pero que a algunos el impuesto le aumentará. Desde el gobierno municipal también plantean la eliminación de la bonificación por domiciliación bancaria, pero mantendrán las ayudas a las rentas bajas, viudedad o familias monoparentales que cada año tiene un impacto de más de 2 millones de euros beneficiando más de 10.000 familias.

En este ámbito, el gobierno municipal también pretende desplegar un recargo del IBI a los pisos vacíos, una aplicación posible de regular por ordenanza municipal tras el real decreto en materia de vivienda que tenía en cuenta esta opción. Ballarín, sin embargo, no ha especificado cómo sería este recargo.