La comisión de Presidencia del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este miércoles volver a colocar el lazo amarillo en la fachada del Ayuntamiento. La proposición del grupo Demócrata ha salido adelante con los votos de ERC, la CUP y el mismo grupo Demócrata, y la abstención de BComú. Los grupos municipales de Ciudadanos, PPC y PSC han votado en contra de la iniciativa. A pesar de la aprobación, el gobierno de la alcaldesa Ada Colau ha rechazado volver a colocar el lazo amarillo en el Ayuntamiento. El teniente de alcaldía de Derechos de la Ciudadanía, Jaume Asens, ha justificado la decisión porque no quiere entrar en una "guerra de símbolos" en periodo electoral al considerar que "no es lo más adecuado".
Aparte de volver a colocar el lazo amarillo en la fachada del Ayuntamiento y de las sedes de los distritos, la proposición del grupo Demócrata también pedía condenar "el ataque que el Ayuntamiento de Barcelona sufrió la madrugada del jueves 14 de marzo cuando un grupo de encapuchados descolgó el lazo amarillo" y que el consistorio presente una denuncia contra los protagonistas de esta acción.
El teniente de alcaldía de Derechos de la Ciudadanía, Jaume Asens, ha justificado la abstención de BComú a la proposición porque no están de acuerdo con el punto que dice que se vuelvan a poner los lazos amarillos tanto en el Ayuntamiento como en las sedes de distrito.
Defienden que se puso "de manera democrática"
El concejal del grupo Demócrata Jordi Martí ha condenado la "injustificable violencia" con que un grupo de personas descolgó el lazo amarillo de la fachada del Ayuntamiento, Además, ha subrayado que es un símbolo que "reivindica la democracia, la libertad de expresión y la libertad" y que no es "ni partidista ni independentista".
El portavoz de ERC Jordi Coronas ha recordado que el lazo amarillo se puso "de manera democrática" al Ayuntamiento, después de que dos tercios de los concejales dieran apoyo a la iniciativa. Con todo, ha denunciado que la Junta Electoral ha tomado un "criterio arbitrario". "Ejerce de Tribunal Supremo cuando dice que es un símbolo partidista porque no lo es", ha indicado Coronas.
La concejala de la CUP Maria Rovira ha dicho que "hay que ser contundentes y poner en funcionamiento los servicios jurídicos" contra las personas que descolgaron el lazo. Rovira también ha asegurado que "la neutralidad de las instituciones no existe en un marco de conflicto".
Cs, PPC y PSC celebran la retirada del lazo
La concejala de Ciudadanos Maria Magdalena Barceló ha celebrado que el lazo amarillo ya no cuelgue de la fachada del consistorio y ha remarcado que se trata de un "símbolo partidista y parcial". ¿"Tan difícil es apostar por la neutralidad ideológica"?, ha preguntado Barceló, que ha pedido que "se respete la ley" y la decisión de la Junta Electoral.
La concejala del PSC Carmen Andrés ha insistido que se tiene que respetar la legalidad y las decisiones de la Junta Electoral siempre" y, por lo tanto, ha celebrado la decisión del gobierno municipal retirar el lazo amarillo de la fachada porque "es lo que se tenía que hacer". Andrés también ha condenado el "acto incívico" del grupo de personas que intentaron descolgar el lazo, pero ha remarcado que no fue "un ataque".
El concejal del PPC Xavier Mulleras ha celebrado que se haya retirado el lazo amarillo y que el Ayuntamiento vuelva a ser de todos". Ha insistido en que es un "símbolo ideológico" y que es "ilegal" mantenerlo. Además, Mulleras ha condenado "cualquier tipo de violencia", pero ha pedido al resto de grupos municipales que también condenen los "ataques" que sufrieron las sedes de Cs y del PPC en Barcelona.