Según el último barómetro municipal, que se dio a conocer a principios de julio, la falta de limpieza es el segundo problema observado por los barceloneses, después de la inseguridad. Este hecho contrasta con el posicionamiento oficial de la alcaldesa, Ada Colau, que ha negado que Barcelona esté sucia, más allá de "problemas puntuales de limpieza", tal como afirmó al principio de este mes de septiembre, en unas declaraciones que comportaron una avalancha de críticas de la oposición. El caso es que mientras el gobierno municipal defiende en declaraciones públicas que la ciudad está lo bastante limpia, las propias acciones del consistorio las ponen en duda, ya que en los últimos meses ha habido varios refuerzos extraordinarios del servicio de limpieza.

A modo de ejemplo, hay que recordar que ahora hace un año, en octubre del 2021, Colau anunció un plan de choque para mejorar la situación de limpieza con una inversión extraordinaria de 70 millones de euros, en la confianza de que la entrada en vigor de la nueva contrata de limpieza solucionaría todos los problemas en este sentido. Meses después, sin embargo, ya se ha constatado que la entrada en servicio del nuevo contrato no ha resuelto los problemas, así que, pese a negar la evidencia de cara al público, este miércoles el Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado un nuevo refuerzo de los servicios de limpieza, con la incorporación de 25 nuevas brigadas de barrio con el objetivo de reforzar la limpieza en el espacio público. Cabe decir que justo hace dos semanas ya se anunció otro refuerzo, el de la contrata de la limpieza de pintadas, un problema al cual también ha habido que dedicar campañas de la Guàrdia Urbana.

Contradicción flagrante

Más allá de la contradicción flagrante que supone negar problemas de suciedad y en paralelo aumentar los servicios de limpieza, el hecho es que el gobierno municipal ha decidido sumar al servicio ordinario 25 nuevas brigadas de barrio destinadas a hacer un refuerzo de limpiezas específicas que los equipos habituales no pueden hacer en el transcurso de sus rutas habituales y que llegan después del último refuerzo, que tuvo lugar en verano con un total de 120 equipos y 235 personas sumadas al servicio habitual, un 55% más de personal respeto la campaña de verano del año pasado. Estas nuevas brigadas se incorporan a partir de este miércoles, 28 septiembre.

El nuevo personal hará tareas de refuerzo de limpiezas específicas y para llevarlas a cabo se movilizarán nuevos vehículos polivalentes y flexibles, que serán variables en función del trabajo a realizar. Según el ayuntamiento, eso dará mucha flexibilidad para poder hacer frente a diferentes tipologías de limpiezas y de problemáticas, con especial atención a puntos de concentración de llamadas ciudadanas; retirada inmediata de objetos abandonados; limpieza bajo los contenedores; barrido y con agua a presión; limpieza a fondo de parterres vegetales, zonas de taludes o solares; y limpieza de manchas en los pavimentos, zonas de orines, etc.

La entrada en servicio de estas nuevas brigadas será progresivo según los distritos. En este sentido, ya están en funcionamiento en Sant Andreu, Sant Martí, Sants-Montjuic, les Corts, Sarrià-Sant Gervasi, Horta-Guinardó y Nou Barris mientras que en Ciutat Vella, Eixample y Gràcia estarán operativas a principios de octubre. Además, este refuerzo se lleva a cabo paralelamente al despliegue de la segunda fase del contrato de limpieza en los distritos de Sants-Montjuïc, les Corts, Sarrià-Sant Gervasi, Horta-Guinardó y Nou Barris. Desde marzo ya se desplegó el servicio en Ciutat Vella, Eixample, Gràcia, Sant Andreu y Sant Martí.