El Ayuntamiento de Barcelona ha dado a conocer su propuesta de Ordenanzas Fiscales para el año 2022, que plantea una congelación de los impuestos y tasas. Para el próximo ejercicio, también se ha puesto encima de la mesa la desaparición de la rebaja del 75% de la tasa de terrazas que se aplicó a los restauradores como consecuencia de la covid-19.

El consistorio explica que esta propuesta de congelación de los tributos municipales responde a una "voluntad de dar apoyo a la reactivación económica y ayudar a superar la situación actual de manera que no se aumente la presión fiscal a las actividades económicas y a la ciudadanía". Este planteamiento del ejecutivo que encabeza Ada Colau se debatirá a la Comisión de Economía y Hacienda de este jueves y será uno de los puntos del orden del día del próximo pleno municipal para su aprobación provisional.

En relación con la tasa de terrazas, a pesar de que la propuesta no prevé inicialmente ninguna rebaja en este impuesto, el gobierno municipal quiere llegar a un "acuerdo global" y asegura que están "dispuestos a que haya una reducción y a que haya porcentajes similares a los de 2021", pero lo limitan a un "acuerdo con los grupos que tengan ganas de contribuir y de colaborar con la aprobación de ordenanzas y presupuesto", ha explicado Jordi Martí, regidor de Presidencia.

Bonificaciones para edificios con energías renovables

Las ordenanzas fiscales de 2022 que proponen el gobierno de Barcelona en Comú y el PSC prevén introducir bonificaciones fiscales para inmuebles de uso industrial en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para los que tengan edificios con viviendas que tienen sistemas para el aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía que proviene del sol. El porcentaje de bonificación es del 30% durante tres periodos impositivos. Sin embargo, el consistorio calcula que los ingresos por los impuestos serán muy similares a los de 2020 y que habrá una reducción de unos 600.000 euros.

Otra reducción que se prevé en tasas es para aquellos vecinos que tienen un sistema individualizado de recogida de residuos si hacen más de 40 aportaciones al año de la fracción orgánica. En concreto, el 'descuento' será del 20% y el Ayuntamiento prevé que se aplicará a los vecinos y vecinas de Sant Andreu que funcionan con el puerta a puerta. Para acogerse, tendrán que "cumplir con el requisito de participación en el sistema". En la misma nota, el Ayuntamiento explica que "se inician los trabajos para poder aplicarla en Sarrià Vell".

El proceso establece que, una vez las ordenanzas son aprobadas provisionalmente, se abre un periodo de información pública de 30 días y, posteriormente, se lleva a aprobación definitiva. El consistorio calcula que estará en el plenario del mes de diciembre de este año.

Freno a la segunda fase del puerta a puerta

Este lunes 18 de octubre, estaba previsto que entrara en vigor la segunda fase del sistema de recogida de residuos puerta a puerta en Sant Andreu, pero finalmente esta implementación ha quedado aplazada y sin nueva fecha, por ahora.

El concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Eloi Badia, justificó este aplazamiento en la necesidad de "consolidar cuál es el 'modelo Barcelona' de recogida puerta a puerta". En esta línea, defendía que "si todos entendemos que este cambio es positivo, antes de desplegar la segunda fase, consolidamos la fase 1".

 

Imagen principal: La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en el plenario del mes de septiembre. ACN.