A partir del primer semestre del 2026, el Incasòl empezará las obras para construir 637 pisos de uso social que corresponden a 11 promociones que se edificarán en 11 solares ubicados en los distritos de Sant Martí y Sants-Montjuïc. Se trata de la primera fase de las 1.700 viviendas asequibles de alquiler social que forman parte del programa Habitar B! que impulsa el Govern, y que se construirán en los 27 solares que el ayuntamiento de Barcelona cederá en derecho de superficie durante 75 años al Incasòl. Así lo ha anunciado la consellera de Territori, Ester Capella, en una jornada celebrada en el Palau Robert para presentar el programa, y en el que ha detallado que este próximo mes de abril se convocarán los concursos para seleccionar los equipos de arquitectos y la dirección de obras de la primera fase del programa. Con las 1.700 viviendas que se construirán en estos 27 solares cedidos por el ayuntamiento de Barcelona, se podrá aumentar el parque de vivienda de alquiler social con un "nuevo modelo constructivo más inclusivo y más sostenible", ha dicho la consellera.

Una inversión de 221 millones

"Habitar B!, es un programa específico para el impulso de vivienda de alquiler social en la capital de Catalunya", ha explicado Capella, "1.700 viviendas asequibles con una inversión de 221 millones que demuestran este cambio de políticas en materia de vivienda del Govern en Barcelona", ha asegurado la consellera de Territori, que ha recordado que la tarea del Incasòl en Barcelona desde el año 2008, con la crisis económica y la falta de solares de cesión, se había centrado en el programa de remodelación de barrios. Desde su creación, el Incasòl ha invertido 683 millones de euros en la construcción de 6.575 viviendas protegidas en la ciudad, de las cuales 3.748 corresponden al programa de remodelación de barrios. Actualmente, el Incasòl tiene un total de 2.581 viviendas de alquiler en Barcelona.

Según Capella, la dificultad para acceder a una vivienda tanto en Barcelona como en otros municipios de Catalunya es "de extrema gravedad". "Hay quien lo niega, la realidad es la que es", ha señalado. En este sentido, ha recordado que solo en 2023 el precio del alquiler en Barcelona subió un 10% y que en los últimos diez años lo ha hecho un 60%, mientras que en el resto de Catalunya, un 43%. "A nadie le ha subido el salario ni las percepciones por jubilación en la misma proporción", ha reiterado Capella.

El 30% destinado a menores de 35 años

Estas 1.700 nuevas viviendas se construirán en los solares que el ayuntamiento de Barcelona cederá en derecho de superficie durante 75 años al Incasòl, que prevé invertir 221 millones en su construcción, provenientes de los recursos generados por las fianzas de alquiler que gestiona. Una vez el ayuntamiento formalice el derecho de superficie, el Incasòl tendrá cinco años para ejecutar la construcción de las promociones. Se prevé que las obras de la primera fase, con una inversión prevista de 82,81 millones, se inicien durante el primer semestre de 2026.

Finalizada la obra, la Agència de l’Habitatge de Catalunya junto con el Consorci de l’Habitatge de Barcelona establecerá los criterios de adjudicación de los pisos. Se prevé una reserva mínima del 30% del total de las viviendas destinada a jóvenes menores de 35 años. Y si el ayuntamiento lo solicita, se podrá reservar también una parte para políticas específicas de vivienda municipales.

Viviendas para una mejor calidad de vida

Los pisos del programa Habitar B!, responden al concepto de viviendas asequibles que ahora promoverá a la Generalitat en Barcelona y que buscan ofrecer una mejor calidad de vida a los ciudadanos. Serán edificios con viviendas flexibles y des jerarquizadas, que se adaptan a los nuevos modelos de vida de la sociedad, y con espacios comunes seguros, igualitarios e inclusivos que incluirán un servicio de atención en el vecindario para conseguir comunidades vecinales robustas y saludables. Al mismo tiempo, se quiere garantizar un buen mantenimiento de los espacios comunes y del conjunto de las viviendas. Para dar continuidad entre las viviendas y el espacio público se crearán espacios en los bajos destinados a servicios comunitarios, ya sea por parte de organizaciones sociales, entidades del barrio u organismos públicos.

Construcción inclusiva y sostenible

Las nuevas promociones situarán como ejes principales los modelos de gestión energética y el uso racional de los recursos tanto durante la construcción de la promoción como a lo largo de su vida útil. Se prevé que los nuevos edificios cuenten con estrategias de reducción del impacto ambiental, como por ejemplo la utilización de materiales de proximidad en su construcción, buscando soluciones de diseño para alcanzar las cero emisiones.

El emplazamiento de muchos de los solares de las nuevas promociones ayudarán a conseguir estos objetivos especialmente en materia de energía, tanto térmica como eléctrica, ya que las redes de calor ya existentes a tanto en la Marina como en el Pueblo Nuevo 22@ facilitan un consumo energético eficiente y reducido. Esta circunstancia permitirá destinar los esfuerzos de los nuevos edificios a la generación eléctrica renovable destinada a ser compartida con otros edificios, contribuyendo, de esta manera, a la universalidad de la energía de origen renovable.