Primera víctima de las audiencias del verano. Telecinco ha apostado por dos presentadores catalanes para su parrilla y los ha chamuscado: Santi Millán y Jordi González. Millán conducía un programa de cocina al estilo Telecinco, Mi madre cocina mejor que la tuya, con famosos, competición, jurado huraño y gritos. Ha durado tres semanas. Las audiencias en España eran menguantes: 11,8%, 7,9% i 7,4%. La curva descendente es veneno en el gintonic veraniego de Paolo Vasile y el cuarto programa grabado lo ha relegado de madrugada después de la película.
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El programa venía cargado de críticas de machismo, por hacer cocinar sólo mujeres en el debut. Lo peor es que era aburrido. En Catalunya Santi Millán no ha sido profeta a su tierra: 7,5% para empezar es un mal primer plato. La siguiente semana cayó al 4,6% en Catalunya y con este menú: castigado sin postres en Telecinco. Lo sustituirá El marido de mi hermana, un filme romántico de Pierce Brosnan que Telecinco considera que hará más audiencia que las ollas y paellas de Millán.
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Estos números insuficientes para la cadena líder en España hacen peligrar la otra gran apuesta de Telecinco: Hechos reales. Sólo con dos emisiones ha hecho unos datos parecidos: peor estreno que Millán con un 9,9% pero sube el segundo día al 11,8%. Jordi González no se libra de las críticas por preguntas amarillas a víctimas de crímenes: "¿Se arrepiente de no decir a su hija asesinada que se dejara violar?" o "Tu prima secuestrada por una secta cuando era menor ¿es boba?".
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Millán tenía los programas grabados y González los hace en directo. Dos apuestas de diferente talante pero con el sello inconfundible de Telecinco. El verano es más para peliculitas ramplonas con Brosnan haciendo de veterano atractivo que todavía tiene éxito con las mujeres. Como Santi Millán pero británico.