El escenario navideño en la realeza británica se tiñe de tensión y negociaciones económicas. La posibilidad de un encuentro entre el príncipe Harry, Meghan Markle y los miembros de la Familia Real en el Reino Unido parece estar en la cuerda floja, sobre todo por las exigencias monetarias de la duquesa de Sussex. Mientras se especula sobre un reencuentro familiar durante la próxima Navidad, informes sugieren un giro inesperado en la relación entre Harry y su padre, el rey Carlos III. Fuentes internas del Palacio apuntan a una llamada telefónica durante el cumpleaños del monarca como el punto de inflexión crucial en esta situación.

El príncipe Harry parece estar dispuesto a aceptar una invitación para pasar las festividades con Carlos III y el resto de la familia en Sandringham, así como una posible visita a Balmoral en verano. Sin embargo, estas decisiones están supeditadas a la postura inflexible de Meghan Markle, quien se ha opuesto en varias ocasiones a que sus hijos, Archie y Lilibet, visiten el Reino Unido y se reúnan con su familia paterna.

Millones en juego: la demanda de Meghan Markle

A pesar de su falta de entusiasmo por un posible encuentro con los Windsor, Meghan tiene el firme deseo de evitar cualquier narrativa desfavorable que pueda surgir al respecto. Es por ello que la ex actriz de 'Suits' ha planteado una propuesta a su suegro. De manera clara, ha expresado que si el monarca busca reunirse con sus nietos, Archie y Lilibet, será necesario que realice una inversión económica significativa. La duquesa de Sussex ha establecido como requisito para este encuentro que se le devuelva su hogar en el Reino Unido, Frogmore Cottage, propiedad que les fue cedida por la reina Isabel II en 2018 al contraer matrimonio y de la cual fueron desalojados a mediados de este verano por orden del nuevo monarca. Esta propiedad, de cinco habitaciones y un valor arquitectónico especial, fue reformada con una inversión cercana a los 2,8 millones de euros por parte de los Sussex y ahora estaría lista para ser alquilada.

El firme propósito de Meghan Markle: recuperar su hogar en el Reino Unido

Harry y Meghan residieron allí durante apenas seis meses antes de comenzar un nuevo capítulo en Estados Unidos. En enero pasado, se les solicitó abandonar permanentemente la casa, luego de la controversia generada por las memorias del príncipe Harry, las cuales afectaron negativamente la imagen de la Familia Real británica. No obstante, Meghan Markle está decidida a recuperar Frogmore Cottage, dado que desea evitar una situación similar a la humillación que sufrió Harry durante la conmemoración del primer aniversario del fallecimiento de Isabel II, cuando no se le permitió alojarse en una residencia real por no haber dado aviso con anticipación, lo que llevó al hijo del rey a hospedarse en un hotel. Ante esta nueva demanda, la incertidumbre sobre la reunión familiar en las festividades persiste, mientras Meghan Markle continúa presionando con sus exigencias millonarias para garantizar su presencia y la devolución de su antigua residencia en territorio británico.