La última temporada de la popular serie de Netflix, ‘The Crown’, ha desatado controversia al abordar los días finales de la princesa Diana, su romance con el productor de cine Dodi Fayed y su trágico fallecimiento en un accidente de coche en París en 1997. El príncipe Harry, hijo de Lady Di, ha optado por no ver estos episodios, según reveló una fuente al portal ‘Page Six’.

El retrato de la difunta princesa Diana en la serie ha generado una serie de reacciones. Elizabeth Debicki personifica a Diana de manera peculiar, incluso en escenas donde su imagen se presenta como un fantasma interactuando con su ex esposo, el entonces príncipe Carlos, y su ex suegra, la reina Isabel II. En un momento particularmente conmovedor, la serie muestra a un joven Harry siendo despertado para recibir la trágica noticia de la muerte de su madre, mientras su hermano mayor, el príncipe Guillermo, observa conmocionado. Además, se aborda la última conversación entre Diana y Harry, quien tenía 12 años en el momento del accidente. Según la fuente, “debido a la naturaleza sensible del contenido de los próximos episodios de The Crown, es comprensible que el Príncipe Harry haya decidido no ver esta temporada”.

El dolor de Harry: un trauma insuperable

El príncipe Harry ha sido bastante franco respecto al dolor que sufrió tras la pérdida de su madre. En su autobiografía "Spare", ha revelado cómo experimentó una fase inicial de negación al recibir la noticia del fallecimiento de Lady Di. Los años que siguieron a esa tragedia fueron extremadamente complicados para él, sumergido en un profundo tormento emocional que solo pudo empezar a abordar cuando alcanzó la edad adulta. Además, en distintas entrevistas y charlas públicas, el duque de Sussex ha compartido cómo la ausencia de su madre afectó su vida personal y cómo la búsqueda de ayuda profesional se convirtió en una parte crucial para abordar y sanar las heridas emocionales que perduraron por años, destigmatizando los problemas de salud mental.

Debido a esto, resulta curioso que tanto él como su esposa, Meghan Markle, hayan firmado un contrato con Netflix, la plataforma que emite la serie. Aunque se dice que Harry no alberga rencores hacia los creadores del programa o hacia la plataforma en sí, muestra una oposición clara a la representación de los últimos momentos de la vida de su madre. Considera que es éticamente incorrecto sacar provecho económico de un momento tan doloroso y personal en su vida.

Críticas a la veracidad de la representación

Además de las críticas por parte de Harry, la precisión histórica de la serie también ha sido cuestionada. La experta en realeza, Sally Bedell Smith, señaló discrepancias en las escenas, como la supuesta propuesta de matrimonio de Dodi Fayed a Diana la noche de su fallecimiento, detalle que, según la experta, carece de evidencia real. Asimismo, se ha desmentido una escena que sugiere que el príncipe Carlos debió rogar por un funeral de Estado para Diana. Según Bedell Smith, fue la reina Isabel quien reconoció la necesidad de un homenaje público y gestionó el traslado del cuerpo de Lady Di desde París.