Cuatro amigos de toda la vida de Girona, tres de ellos sin empleo por la pandemia y un cuarto que seguía estudiando. Tenían claro que querían emprender un negocio y creyeron que durante el confinamiento podían ponerlo en marcha porque tenían todo el tiempo del mundo y mucha ilusión para llevarlo a cabo. Sin embargo, no sabían muy bien a qué segmento querían enfocarse y, tras una lluvia de ideas, decidieron hacer una fuerte apuesta por las pizzas

El delivery fue la segunda cosa que decidieron y poco después pensaron en el elemento diferenciador: la forma cuadrada del producto. "Nos metíamos en un segmento muy específico, así que necesitábamos aportar algo diferente para darnos a conocer", comenta Adrià Reixach, uno de los cofundadores de la marca a ON ECONOMIA. Con el producto, la forma y el sector nació Squadra, un laboratorio de pizzas para todos los públicos

"Una vez tuvimos claro el modelo de negocio, solamente nos faltaba aprender a hacer pizzas, porque ninguno de nosotros sabía", recuerda el emprendedor a este medio, que añade que estuvieron una semana con el quinto veces campeón de pizzas Jesús Marquina, quien les enseñó lo fundamental para cocinar una pizza. 

75.000 pizzas vendidas

Tras aprender a cocinar las pizzas con el experto y empezar a venderlas a través de delivery por Girona, Adrià Reixach, Juan Pablo Claret, Joel Serra y Marc Almeda decidieron aterrizar en Barcelona. "Empezamos a mediados de 2020 y desde entonces teníamos claro que queríamos ir a Barcelona, así que después de una prueba en nuestra ciudad aterrizamos aquí", apunta Reixach. Durante sus primeros meses de vida también pasaron por la Santa Market de la Costa Brava (Girona) y por la Cerdanya con un local temporal. "Este año lo vamos a repetir porque fue una experiencia fantástica y vamos a ampliar nuestra presencia en otros festivales y eventos del país", señala.

En este sentido, Reixach explica que están ultimando los últimos flecos para poner en marcha una food-truck para moverse por todo el territorio y estar presentes en otros mercados y conciertos. Antes de acabar el año, prevén una o dos aperturas más y consolidar su presencia en Barcelona. "La expansión nos la planteamos, pero para más adelante. Queremos afianzarnos aquí y a largo plazo ir a ciudades como Madrid y más tarde dar el salto al extranjero; pero ahora mismo no es nuestra prioridad". Desde que iniciaron el proyecto han vendido más de 75.000 pizzas y el emprendedor asegura que la más vendida "con diferencia" es la trufada. 

Pizzas de temporada

Como novedad para este año, los cuatro amigos han decidido lanzar las pizzas de temporada. ¿Cómo funcionan? Cada mes la compañía dará a conocer una nueva pizza, evidentemente de forma cuadrada y creada por un profesional de su sector. "Queríamos diferenciarnos de las pizzerías de comida rápida y consideramos que con estos lanzamientos podíamos aportar algo diferente, rompedor y novedoso". Para la primera pizza de temporada han contado con el chef del Celler de Can Roca Joan Roca, quienes les ha elaborado una pizza a base de tomate, mozzarella, queso de cabra, sobrasada, rúcula, uva y reducción de frutos rojos a un precio de 14,50 euros. 

"Hemos empezado con Joan Roca porque es una persona a la que admiramos y, más allá de ser de Girona como nosotros, nos dijo que sí sin apenas pensárselo", confiesa. Para el mes que viene, cuando las pizzas de Joan Roca ya no estén disponibles, van a contar con otra persona relevante, en este caso será una actriz. "Buscamos personas que sean relevantes dentro de su entorno, que destaquen en su sector", aclara el emprendedor. 

Apuesta por el "gourmet"

Squadra Pizza Lab nació con una inversión inicial de 50.000 euros, emplea a unas 15 personas y cuenta con más de una docena de pizzas en su carta, además de postres y combos con bebidas. En Girona es el restaurante que más vende a través de Glovo y la receta del éxito de Squadra es la calidad y proximidad de los productos, la masa que producen y su fermentación de 72 horas, además de la original forma de las pizzas. "Más allá de la originalidad que queríamos aportar, ¿qué sentido tiene que las cajas de las pizzas sean cuadradas y el producto del interior sea redondo?", critica Reixach. 

Sobre cómo ven la compañía a largo plazo, el emprendedor augura que Squadra se acabe convirtiendo en una cadena de pizzas "gourmet" con el objetivo de dejar de lado el concepto de "corte de pizza a tres euros". ¿Y lo del laboratorio del nombre? "Todos los trabajadores van con un mono amarillo, como si estuvieran trabajando en un laboratorio, en los restaurantes tenemos colocada la tabla periódica y desde el principio nos gustó la idea, así que lo vamos a mantener", acaba Reixach.