El caso de la plataforma de criptomonedas FTX sigue acaparando protagonismo en el sector en 2023. El fundador del 'exchange' de criptoactivos, Sam Bankman-Fried, se ha declarado no culpable de los delitos que le atribuyen las autoridades de Estados Unidos tras la quiebra de su empresa, que llegó a valer 32.000 dólares. Así lo ha manifestado este martes en un tribunal federal de Nueva York, después de que quedara en libertad bajo fianza tras haber sido detenido y extraditado desde las Bahamas el pasado diciembre.

El joven empresario, al que se le llegó a considerar como un nuevo gurú dentro del mundo inversor, se presentó en persona ante el juez, en medio de una gran presencia mediática, para responder por los ocho cargos que le imputa la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York. Entre los cargos de los que se le acusa se encuentran los de fraude electrónico, lavado de dinero y violación de las leyes de financiación de campañas políticas.

Sus antiguos socios se declararon culpables

Sam Bankman-Fried, o SBF (como se le conoce por sus iniciales), fue extraditado a Nueva York el mes pasado desde las Bahamas. En este paraíso fiscal tenía la sede de su empresa y su propio domicilio. Sin embargo, la situación actual le ha obligado a permanecer desde el 22 de diciembre en libertad condicional en casa de sus padres en Palo Alto (California, EEUU), tras acordar una de las fianzas más altas de la historia de EE.UU., de 250 millones de dólares.

La decisión del joven multimillonario contrasta con la que tomaron sus compañeros de negocio ante las acusaciones que las autoridades judiciales de Estados Unidos han vertido sobre ellos. De este modo, tanto Caroline Ellison, ex directora ejecutiva de Alameda Research (firma de inversión que a su vez actuaba como fondo de cobertura de FTX), como Gary Wang, cofundador de la plataorma, se declararon culpables de fraude y decidieron cooperar con los investigadores.

Según la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), Alameda Research cogió dinero de los clientes de FTX para financiarse y Ellison usó los fondos de dichos clientes malversados para la actividad comercial de Alameda. “Como parte de su engaño, alegamos que Caroline Ellison y Sam Bankman-Fried planearon manipular el precio de FTT, un token de ciberseguridad de intercambio que era parte integral de FTX, para manipular el valor”, aseguró el regulador norteamericano. Una trama en la que Ellison y Wang "desempeñaron un papel activo" para hacer un uso indebido de los activos de los clientes de la plataforma.

Incautados 3.500 millones de dólares

Asimismo, la Comisión de Valores de Bahamas ha informado recientemente de la incautación de activos digitales por valor de más de 3.500 millones de dólares al 'exchange' de Bankman-Fried, los cuales han sido traspasados a las carteras digitales del regulador para su custodia. El 12 de noviembre, un día después de que FTX se declarara en quiebra, la plataforma sufrió un hackeo externo a través del cual fueron sustraídos de la bolsa de criptomonedas 'tokens' por valor de 372 millones de dólares.

Este suceso, junto al posible saqueo de carteras controladas por FTX por parte de antiguos empleados, fue clave para que la Comisión de Valores de Bahamas determinara que “existía un riesgo significativo de disipación inminente en cuanto a los activos digitales bajo la custodia o control de FTX en perjuicio de sus clientes y acreedores”. Como resultado, el organismo regulador solicitó y obtuvo una orden judicial para salvaguardar los activos digitales propiedad o bajo custodia de FTX.

Los activos serán retenidos hasta que el Tribunal Supremo de Bahamas ordene a la Comisión que los entregue a los clientes y acreedores que ostentan la titularidad de los mismos, según señala el comunicado. Del mismo modo, el regulador aseguró que Sam Bankman-Fried y Gary Wang ya no cuentan con acceso a los 3.500 millones de dólares en ‘tokens’ que se encuentran bajo control de las autoridades bahameñas.

En este sentido, el Tribunal Supremo de las Bahamas explicó que la Comisión “continuará llevando a cabo una investigación exhaustiva y diligente sobre las causas de la quiebra de FTX, actuará de acuerdo con las instrucciones emitidas por el Tribunal Supremo de las Bahamas, colaborará con otras autoridades de supervisión y tomará las medidas adicionales que sean necesarias para preservar los activos de FTX y salvaguardar los intereses de los clientes y acreedores de FTX”.

Por el momento, los únicos usuarios de FTX que podrán comenzar a retirar sus activos bloqueados son los de Japón el próximo febrero, según comunicó la firma. El 'exchange' aseguró recientemente que en el país nipón los usuarios podrán comenzar con los retiros.

"Para los activos que nos confiaron nuestros clientes en FTX Japan y Liquid Japan, estamos procediendo con el desarrollo del sistema para que los retiros sean posibles desde la versión web de Liquid Japan", explicó la filial. De este modo, los clientes podrán verificar su saldo de FTX Japan desde la versión web de Liquid Japan, y posteriormente retirar fondos, mientras que los usuarios de la plataforma Liquid Japan podrán realizar retiradas como de costumbre.