Elon Musk ha vuelto a las primeras planas de los medios de comunicación después de que él mismo anunciase en la madrugada del miércoles su salida de la directiva de Twitter. El magnate de origen sudafricano volvió a recurrir a la red social, como de costumbre, el pasado domingo para conocer la opinión de la ciudadanía sobre sí debía seguir llevando las riendas de la compañía. Tras unos días, el resultado de la encuesta ha sido de 57,5% a favor de que salga de la presidencia de Twitter por un 42,5% que quieren que siga liderando la empresa del pájaro azul.

Él mismo se ha encargado de ‘zanjar’ el tema: “dimitiré como CEO en cuanto encuentre a alguien lo suficientemente tonto como para aceptar el trabajo”, ha expresado Musk en su cuenta de Twitter ante los más de 122 millones de seguidores que aglutina. Las palabras del empresario y dueño de Tesla han tenido calado en el entorno empresarial y bursátil. Tanto es así que la respuesta del segundo hombre más rico del mundo ha perforado un poco más si cabía la cotización del Dogecoin, la cripto estrella de Musk.

Musk nunca ha escondido su lado criptoinversor

Los inversores conocen la faceta criptoinversora del empresario y el gusto que tiene por el sector. En varias ocasiones se ha pronunciado acerca del potencial de estos activos. Pero además de ello, Musk siempre ha reflejado su gusto por el Dogecoin, incidiendo de lleno sobre la cotización de este. Hay quien piensa que lo hacía de forma deliberada, por su propio beneficio. Otros consideraban que el CEO de Twitter realmente ve potencial en la criptomoneda meme. Sea como fuere, ante cualquier movimiento del magnate sudafricano, cualquier comentario, tweet… La reacción del Doge era inminente.

Nuevo ‘golpe’ para el Dogecoin

La supuesta salida de Elon Musk de la dirección de Twitter ha sido el último palo que ha recibido el Dogecoin. De base, y pese a que la criptomoneda del shiba inu ha tenido fases alcistas en el año provocadas por el empresario, el Doge mantiene una caída anual superior al 54%. Aunque la cripto muestra picos alcistas tanto a comienzos de año como a finales de octubre, la realidad es que la memecoin no se ha salvado del vendaval bajista que sigue sacudiendo al mercado de las criptomonedas.

Tras el tweet de Musk, el Dogecoin ha experimentado una nueva caída del 2,60%. Es cierto que la reacción del mercado no ha sido tan negativa como cabría esperar. Aún ello, el descenso es un indicador de lo sujeta que sigue estando la cripto a los movimientos de Musk. De hecho, las principales fases alcistas que muestra el Doge se deben a movimientos empresariales del dueño de Tesla, u opiniones que ha hecho en público el magnate de origen sudafricano.

Un activo volátil, pero sujeto a Musk

Un buen ejemplo de la incidencia de Elon Musk sobre el Dogecoin está en la cotización de la criptomoneda a inicios del presente ejercicio. En dicho momento, el activo mantenía un precio de entre 0,13 euros y 0,15 euros. Desde el 10 de enero hasta el 15 de enero, el activo creció un 28% debido al anuncio de que Tesla, empresa liderada por Musk, aceptaba pagos con Dogecoin. Dicha medida animó a los inversores de la criptomoneda meme a apostar por un activo que, dicho por Musk, nació como una broma y del que no hay demasiada seriedad.

Con el estallido de la guerra de Ucrania en febrero y, posteriormente, con la caída de LUNA y el TerraUSD, y la quiebra de Celsius a finales del primer semestre, el Dogecoin cedió hasta 0,05 euros, siendo este su nivel más bajo en el presente ejercicio.

En verano, la criptomoneda tuvo un repunte, nuevamente, devenido por Musk. En esta ocasión, el segundo hombre más rico del mundo habló en una entrevista para Full Send Podcast. En ella, el ahora dueño de Twitter admitió que apoyaba al Dogecoin porque “aunque fue diseñado para ser una ridícula moneda de broma, la capacidad de rendimiento transaccional total de Doge es mucha mayor que la de Bitcoin”.

Twitter volvió a agitar al Dogecoin

Estas palabras volvieron a animar a la cotización del activo, aunque el efecto fue efervescente. Tras ello, varios expertos e inversores comenzaron a denotar que el ‘efecto Musk’ no era tan fuerte como a comienzos de año. Pero con la llegada del empresario a la presidencia de Twitter, el Dogecoin marcó la que es una de las apreciaciones cortoplacistas más elevadas del ejercicio.

Elon Musk aterrizó en la dirección de la red social el pasado 26 de agosto. Desde antes de dicha fecha hasta el 1 de noviembre, el Dogecoin creció por encima del 133%. El pasado 1 de noviembre, la criptomoneda reina regresó a los niveles que marcaba a comienzos de año. Pese a ello, el activo no ha vuelto a tantear esa zona. De hecho, el valor actual es de 0,06 euros.

Aunque con menos fuerza, el peso de los comentarios, acciones comerciales u operaciones empresariales del magnate dueño de Tesla sigue siendo elevado sobre Doge. La criptomoneda meme parece haberse desprendido del efecto de Musk. Aún ello, el último mensaje emitido por el empresario parece haber dado un nuevo golpe a la valoración de Dogecoin.

Varios expertos coinciden en que la depreciación anual de la cripto se debe a los polémicos movimientos de Musk en Twitter, además de por todos los acontecimientos que han perjudicado al sector. Sea como fuere, el Dogecoin vuelve a ceder. La cripto ha caído más de un 2,40% en una jornada apaciguada para el resto de los activos electrónicos. Musk sigue desluciendo su criptomoneda estrella.