Coinbase, una de las plataformas de criptomonedas más grandes del mundo, ha llegado a un acuerdo con las autoridades del Estado de Nueva York para pagar una multa de 50 millones de dólares por la falta de controles contra el blanqueo de capitales, entre otras conductas delictivas, según ha hecho público este miércoles el Departamento de Servicios Financieros (DFS) del propio estado.

Adicionalmente, Coinbase se ha comprometido a invertir otros 50 millones de dólares para poner solución a los problemas detectados por las autoridades. Según el DFS, el 'exchange' de criptoactivos cometió fallos significativos en su programa de cumplimiento normativo que infringían la ley bancaria estatal y la normativa sobre monedas virtuales, transmisores de dinero, supervisión de transacciones y ciberseguridad. 

Los fallos detectados hicieron que la plataforma Coinbase fuera vulnerable a conductas delictivas graves, entre las que se encuentran ejemplos de fraude, posible blanqueo de dinero, sospecha de actividad relacionada con material de abuso sexual infantil y posible tráfico de estupefacientes.

Más de 100.000 alertas sobre transacciones de clientes potencialmente sospechosos

Es por ello que tendrá que abonar una multa de 50 millones de dólares (unos 47 millones de euros) e invertir la misma cantidad durante los próximos dos años para poner fin a los problemas y mejorar su programa de cumplimiento normativo conforme al plan aprobado por el Departamento de Servicios Financieros.

La multa hacia Coinbase se emitió después de que los reguladores neoyorquinos descubrieran que la empresa había permitido a sus clientes abrir cuentas sin realizar suficientes comprobaciones de antecedentes. Una situación que podría violar de la legislación contra el blanqueo de capitales del Estado de Nueva York.

En este sentido, las autoridades señalan el fracaso de la compañía para identificar adecuadamente a los clientes y monitorear su actividad para detectar actividades sospechosas. Una conducta que fue identificada inicialmente durante un examen rutinario el pasado 2020 y por el cual los reguladores determinaron que los problemas de la compañía persistían. Más tarde, en 2021, estos primeros indicios llevaron a una investigación formal.

Sobre Coinbase pesaban más de 100.000 alertas sobre transacciones de clientes potencialmente sospechosas que no estaban siendo examinadas. Los investigadores descubrieron que la plataforma de criptomonedas solo había llevado a cabo comprobaciones básicas antes de permitir que las personas abrieran cuentas.

Compromiso con los reguladores en un momento crítico para la industria

La plataforma también ha anunciado el acuerdo con las autoridades a través de un comunicado, donde señala que su objetivo “siempre ha sido y será construir la bolsa de criptomonedas más fiable, segura y que cumpla las normas del mundo”. En este sentido, la compañía fundada por Brian Armstrong (que cuenta con una participación minoritaria del banco español BBVA) ha señalado que la resolución es "un paso crítico en nuestro compromiso con la mejora continua, nuestro compromiso con los reguladores clave, y nuestro impulso para un mayor cumplimiento en el espacio cripto para nosotros y para los demás”.

Coinbase asegura que lleva a cabo investigaciones proactivas de forma rutinaria para eliminar a los malos actores de su plataforma y que trabaja con las fuerzas del orden para que sean llevados ante la justicia. Al tiempo, reconoce que el sector de las criptomonedas se encuentra en un punto de inflexión y que está sujeto a un intenso escrutinio. 

Por su parte, el director jurídico de la plataforma, Paul Grewal, ha destacado que "reconocemos que la industria de las criptomonedas se encuentra en un punto de inflexión en este momento y que cada movimiento público de una empresa de criptomonedas recibirá un intenso escrutinio".

Es por ello que el directivo también ha expresado la necesidad de la industria de producir agentes comprometidos con el cumplimiento y el trabajo de los reguladores. "Esa es una de las razones por las que sabíamos que era importante llevar este asunto a una conclusión", ha señalado. "Nunca hemos evitado trabajar con los reguladores para hacer de la industria un espacio más seguro y más compatible" ha añadido Grewal.

El sector sigue envuelto en polémicas

El caso de Coinbase es el último de la larga lista de polémicas por falta de seguridad, quiebras y estafas en las que se ha visto envuelto el sector en los últimos meses. En paralelo a la investigación a Coinbase, se está llevando a cabo el caso contra el fundador de FTX por varios delitos de fraude y malversación tras la quiebra de la plataforma el pasado noviembre.

El fundador del 'exchange' de criptoactivos, Sam Bankman-Fried, se declaró inocente este martes de los delitos que le atribuyen las autoridades de Estados Unidos tras la quiebra de su empresa, que llegó a valer 32.000 dólares. El joven multimillonario lo manifestó ante el tribunal federal de Nueva York, después de que quedara en libertad bajo fianza tras haber sido detenido y extraditado desde las Bahamas el pasado diciembre.

Mientras, el mercado criptográfico sigue inmerso en un 'criptoinvierno' protagonista durante todo el año pasado. Tras alcanzar el Bitcoin máximos históricos en noviembre de 2021, llegando a superar los 68.000 dólares, la tendencia bajista de la principal moneda por capitalización y del resto de los activos de la industria ha marcado su comportamiento. Actualmente el Bitcoin cotiza en los 16.800 dólares.