El Banco de España ha dado luz verde a emprender una prueba piloto de la fintech Monei con la emisión de euros digitales en España. La compañía española tiene el objetivo de sentar las bases del euro digital que quiere implantar el Banco Central Europeo y ha empezado con un proyecto en el marco de sandbox (banco de pruebas controladas) del Banco de España. "Llevábamos dos años trabajando en el proyecto a nivel interno, en 2021 presentemos una primera solicitud al Banco de España, nos dijeron que había ciertos matices técnicos que debíamos corregir y finalmente en diciembre de 2022 nos autorizaron a presentar el proyecto", explica Alex Saiz Verdaguer, fundador y CEO de Monei en una entrevista para ON ECONOMIA.
El empresario asegura que los "matices técnicos" estaban relacionados con el blanqueo de capital y la seguridad para el usuario final y añade que "estamos trabajando con el Banco de España para dinamizar las pruebas y lanzarlo en cuanto antes al mercado". Tras la prueba piloto, ¿cuándo prevéis lanzarlo? "Nosotros queremos sacarlo en menos de un año, en seis o doce meses calculamos poder salir al mercado", argumenta Saiz. Por contra, no se atreve a aventurarse a largo plazo porque "nos encontramos en un cambio de paradigma muy bestia y no se puede calcular". En esta línea, el directivo añade que "quizás vienen los bancos tradicionales y llegamos a un acuerdo conjunto o no acaba pasando nada de esto". "Al final, nosotros estamos en actitud constructiva y tendemos las manos al máximo de gente posible, pero no depende solo de nosotros, así que el tiempo dirá", aclara.
Inicio de las pruebas
Sin embargo, desde el Banco de España afirman a este medio que el proyecto cuenta con una "evaluación previa favorable para pasar a la siguiente fase" y que en esta se "negociará el protocolo de pruebas con el promotor, analizará los detalles del proyecto, los participantes, los plazos de pruebas y las garantías presentadas que se formalizarán en un protocolo de pruebas que aún no está firmado y que es imprescindible para poder comenzar la siguiente fase". Además, desde el organismo público hacen hincapié en que "no se ha determinado aún ni la duración ni la fecha de inicio de las pruebas".
El Banco de España recalca que el proyecto "no tiene nada que ver con el euro digital" y subraya que "no se trata de un prototipo ni de una prueba piloto para el euro digital". Igualmente, desde el organismo suscriben que "no se puede llamar euro digital a la moneda que emitan en las pruebas" y agregan que "el euro digital es un proyecto liderado por el BCE y el Eurosistema que, actualmente, está en fase de investigación". "El Banco de España no ha decidido que Monei Digital Payments lidere ningún proyecto relacionado con el euro digital (no puede hacerlo unilateralmente) y, el resultado de las pruebas de Monei no tendrá ninguna relación ni ninguna repercusión en el desarrollo del euro digital que está estudiando el Eurosistema", acaban desde la institución presidida por Pablo Hernández de Cos.
Euro digital y su adopción
¿Cómo funciona el euro digital que presenta Monei? En la fase de prueba, el usuario debe introducir su número de teléfono, validar su identidad y cargar el dinero a través de Bizum. De forma automática, este dinero o token se convertirá en otros tantos euros digitales. A partir de entonces, cada moneda digital representará un euro físico y todo el dinero estará custodiado en dos cuentas de salvaguarda y se podrá canjear por euros físicos en cualquier momento. Entonces, ¿la moneda tradicional y la digital pueden convivir? "Mientras el dinero efectivo exista, convivirán. El día que se elimine el efectivo es muy probable que la moneda tradicional desaparezca", apunta. "Ahora contamos con dos formatos: la banca online, que sería semi digital, y el formato efectivo. El día que deje de existir, el tradicional dejará de existir, pero el usuario ni se enterará".
En esta línea, Alex Saiz indica que la adopción será rápida porque "el potencial de funcionalidades es muy bestia". "La adopción del euro digital tendrá una trascendencia muy grande y la velocidad que coja dependerá de los reguladores, el Banco Central Europeo y de los políticos, entre otros; aunque me aventuro a decir que será muy rápida su implementación".
¿Y sobre cómo explicar al usuario la diferencia entre Monei y una entidad bancaria tradicional? "La infraestructura que ofrecemos nosotros es totalmente diferente, ya que es descentralizada e inmutable. Por contra, en una entidad bancaria tradicional el dinero está en un único punto". Asimismo, suscribe que "es mucho más seguro" y que el concepto de cadena de bloques "es un nuevo paradigma que se debe explotar". "Nosotros permitiremos llevar los pagos y el envío de dinero a un nuevo nivel, totalmente digitalizado, más seguro, programable y con unos costes muy inferiores a los actuales", defiende. "Para que los usuarios comunes lo entiendan, hasta ahora movíamos naranjas en un carro y ahora pasaremos a mover las naranjas sobre unos raíles que van en AVE. Con el euro es lo mismo, hasta ahora nuestro dinero iba en unos raíles concretos, arcaicos y limitados y a partir de ahora pasarán a moverse a través de cadenas de valores".
Entre las ventajas, la propia empresa aclara que el euro digital permite mandar desde cientos de euros a fracciones de céntimos cada cierto intervalo de tiempo, incluso milisegundos, por ejemplo, para pagar dietas de transporte o alimentación a empleados.
¿Qué similitudes y diferencias hay con las criptomonedas?
¿Qué relación tiene el euro digital con las criptomonedas? "Son mundos que no tienen nada que ver, uno está a años luz del otro", defiende el CEO de la fintech, aunque matiza que "las partes de abajo se pueden parecer por la tecnología que usan, por el blockchain", pero afirma que "no tienen nada que ver". Además, destaca que la moneda digital es "segura y estable, y los euros están custodiados" y agrega que las criptomonedas son "volátiles y con ciertos problemas".
Finalmente, desde Monei detallan que el potencial número de usuarios en España es de casi 57 millones, el número total de líneas de telefonía móvil que hay dadas de alta en España, y que queda mucho recorrido por "explorar".