Inditex se ha convertido en una de las mayores multinacionales textiles del mundo, gracias especialmente a Zara. Además de su buque insignia, la compañía de Amancio Ortega ha logrado rentabilizar todas las marcas que opera en 213 países y multiplicar sus beneficios año tras año. Pero, más allá de las caras más visibles que forman el grueso de las ventas del grupo, Inditex tiene una joya oculta que le genera importantes beneficios en concepto de dividendo al cierre de cada ejercicio.

Se trata de Tempe, la empresa dedicada a la fabricación de calzado para todas las marcas de la compañía. Inditex es propietaria al 50% de esta sociedad radicada en Elche y fundada por la familia García Peralta, que se encarga de proveer de zapatillas, zapatos y todo tipo de calzado a Zara, Massimo Dutti, Pull&Bear, Bershka, Stradivarius y Oysho. La otra mitad de la compañía pertenece al empresario Vicente García Torres, que ejerce también de presidente.

La creación de Tempe se remonta a finales de los años ochenta, hasta convertirse en una de las empresas líder dentro del sector del calzado. Desde entonces, ha recorrido un camino lleno de ventas y beneficios de la mano de Inditex. Aunque la empresa tiene su domicilio social en Arteixo (A Coruña), en la sede central de Inditex, sus oficinas se encuentran en la ciudad alicantina de Elche, donde se ubican también sus principales núcleos de producción de calzado.

300 millones en dividendos en la última década

Los éxitos comerciales de Inditex, que reporta actualmente beneficios superiores a los 5.300 millones de euros, han ido de la mano de los éxitos de Tempe. El zapatero de la textil consiguió aumentar un 35% su beneficio en 2023, hasta los 142 millones de euros, y un 7,1% sus ventas, hasta alcanzar los 1.500 millones de facturación a cierre del ejercicio. Una situación que le ha permitido repartir beneficios entre sus principales accionistas.

De este modo, la compañía de Amancio Ortega ha recibido 49 millones de euros en concepto de dividendos por parte de Tempe, misma cifra que Vicente García Torres, según consta en el último informe financiero anual de Inditex. Si echamos la vista atrás, la última década ha sido muy fructífera para la compañía ilicitana, cuya actividad ha sido rentable en cada uno de los años del periodo analizado. 

En este sentido, las ganancias de los últimos diez años superan los 1.000 millones de euros y las ventas rondan los 12.500 millones de euros. Prácticamente, ningún año baja de las cuatro cifras de facturación, aunque las cuentas sí reflejan un pequeño bache en el año de la pandemia, con un beneficio de 62 millones y una facturación inferior a los 1.000 millones de euros.

No obstante, todos los años ha podido generar las ganancias suficientes para dotar a la familia fundadora y a la empresa de los Ortega de generosos dividendos. De este modo, la retribución total de la última década ronda los 300 millones de euros en dividendos para Inditex, con el pico máximo en el año 2019, ejercicio prepandemia, cuando Tempe repartió 60 millones a la multinacional gallega. A raíz de los beneficios de 2023, el dividendo generado ha sido de 49 millones.

Inditex refuerza la producción de Tempe con más almacenes

La joya del calzado de Inditex continúa así con la buena evolución de su negocio gracias al crecimiento de su matriz. Una situación que ha obligado a la multinacional centrar su estrategia en el refuerzo de la logística dentro de España, ante las importantes oportunidades de crecimiento que ha determinado la compañía para el futuro.

Es por ello que el consejero delegado del grupo, Óscar García Maceiras, anunció tras la presentación de los resultados anuales que la compañía desembolsará un montante de 1.800 millones de euros durante este año y 2025 para la creación y puesta en marcha de tres nuevos centros en el país y otro en el extranjero.

Se trata de un proyecto en el que la dueña de Zara otorgará a Tempe más capacidad para su negocio de calzado, con la creación de un centro de distribución de 141.000 metros cuadrados en la Comunidad Valenciana. Además del zapatero del grupo, Inditex también abrirá un nuevo almacén de productos de Bershka en la Comunidad Valenciana, que tendrá una extensión de 116.000 metros cuadrados, así como un nuevo centro de distribución en Zaragoza, con una extensión de 286.000 metros cuadrados para almacenar las prendas de Zara.