La compañía alemana SAP ha presentado los resultados correspondientes al año 2022, reflejando un importante descenso en su negocio. La tecnológica reportó un beneficio neto atribuido de 2.290 millones de euros en el conjunto del año, lo que supone un 56,4% menos que el resultado obtenido el año anterior. El gigante alemán achaca el descenso de sus ganancias en el impacto que ha producido la retirada de la compañía de los mercados ruso y bielorruso. Asimismo, ha anunciado un recorte de plantilla que se saldará con el despido de 3.000 empleados, sumándose así a la ola de despidos entre las grandes multincionales tecnológicas en los últimos meses. 

Concretamente, el impacto sobre el beneficio operativo de todo el año en SAP fue de aproximadamente 410 millones de euros, incluyendo 70 millones en el cuarto trimestre. Esta cifra se corresponde principalmente por la reducción de los ingresos y las provisiones por deuda incobrable en Rusia y Bielorrusia. Aun así, los ingresos totales de la compañía sí que experimentaron un incremento en 2022

De este modo, los ingresos de la firma alemana crecieron un 10,9%, hasta alcanzar los 30.871 millones de euros. Una facturación que se debe en gran parte a la división de computación en la nube, que creció un 33%, hasta lograr los 12.556 millones. Por otro lado, las licencias de software supusieron unos ingresos de 13.965 millones, un 5% menos, mientras que el área de servicios reportó unos ingresos anuales de 4.350 millones, un 16% más.

SAP prevé seguir aumentando los ingresos por el negocio en la nube

En lo que respecta al cuarto trimestre, SAP obtuvo un beneficio neto atribuido de 547 millones de euros, es decir, un 62,4% menos que en el mismo periodo de 2021. Sin embargo, en los tres últimos meses del año también  registró un aumento en los ingresos, en este caso de 5,7%, hasta llegar a los 8.436 millones de euros.

Destaca igualmente el negocio en la nube, que entre octubre y diciembre, incrementó un 30% sus ingresos, hasta los 3.392 millones de euros. En el resto de segmentos, en el tercer trimestre la comercialización de licencias de software reportaron a la compañía 3.900 millones, un 11% menos, mientras que los servicios aportó 1.144 millones, un 15% más.

De cara a 2023, la tecnológica alemana espera obtener unos ingresos de entre 15.300 y 15.700 millones de euros a través del negocio en la nube, con un crecimiento del 22% al 25% a tipo de cambio constante. El crecimiento en este segmento de mercado es el mayor impulso en su negocio, por el que espera reportar alcanzar entre 28.200 y 28.700 millones de euros, con un aumento del 6% al 8% en moneda constante.

Así, para 2025 la multinacional confía en que sus ingresos en la nube superarán los 22.000 millones de euros y elevarán a más de 36.000 millones los ingresos totales de la compañía. "Terminamos 2022 con un fuerte impulso continuado de la nube y un regreso al crecimiento de la utilidad operativa en el cuarto trimestre, marcando un importante punto de inflexión", señaló hristian Klein, consejero delegado de SAP.

Recorte del 2,5% de la plantilla 

Además de los resultados, el desarrollador alemán de software para empresas anunció un plan de despidos que se enmarca en la reestructuración de la empresa. De este modo, SAP llevará a cabo un ajuste del 2,5% de su plantilla, lo que supone el recorte de unos 3.000 puestos de trabajo.

En este sentido, los despidos que llevará a cabo la compañía tecnológica se producirán en áreas específicas de la empresa. El objetivo, según ha comunicado junto con la presentación de sus resultados, pasa por centrarse en las áreas de crecimiento estratégico, así como fortalecer su negocio principal y mejorar la eficiencia general del negocio.

El programa de reestructuración supondrá un impacto de entre 250 y 300 millones de euros que se contabilizarán en las cuentas del primer trimestre de 2023. Asimismo, la multinacional calcula que el programa proporcionará un coste-beneficio moderado en 2023 y de entre 300 y 350 millones de euros en ahorros anuales de costes a partir de 2024, algo que contribuirá a impulsar las inversiones en áreas estratégicas de crecimiento.

Por otro lado, la multinacional ha anunciado que ya estudian la venta de su participación en su filial estadounidense de análisis, Qualtrics. SAP adquirío la compañía en 2018 y aún mantiene una participación en su capital tras su salida a Bolsa en 2021. La venta concuerda con los objetivos de la compañía para optimizar su cartera.

"SAP cree que esta posible transacción podría desbloquear un valor significativo tanto para las empresas como para sus accionistas", ha destacado la compañía alemana, subrayando que la decisión final sobre cualquier transacción, sus condiciones y momento está sujeta a las condiciones del mercado, aprobaciones regulatorias y la autorización del consejo de supervisión.