El Santander, que ha vendido recientemente la mitad de su negocio en Polonia, ha decidido ahora comprar al Sabadell su filial británica y crecer en el Reino Unido, donde es el cuarto banco más grande. El grupo que preside Ana Botín aspira a subir un escalón y convertirse en la tercera entidad del país cuando cierre la compra de TSB, previsiblemente en el primer trimestre de 2026.
Así lo ha puesto de relieve el banco en un comunicado, donde recuerda que la operación de compra de TSB está sujeta a la aprobación de los accionistas de Sabadell (por la opa del BBVA) y a las correspondientes autorizaciones regulatorias.
Aunque ya había trascendido hace días el interés del Santander en TSB, ha sido este martes al cierre del mercado cuando el banco cántabro ha anunciado que había alcanzado un acuerdo para adquirir TSB a Banco de Sabadell, por un precio de 2.650 millones de libras, algo más de 3.000 millones de euros.
Con la operación, Santander UK espera reforzar su posición en Reino Unido "uno de sus mercados clave" al ampliar de manera sustancial su número de clientes y su capacidad de concesión de crédito TSB es un banco comercial con una larga trayectoria en Reino Unido, con una red de 218 oficinas y un negocio digital creciente, destaca. Cuenta con unos 5 millones de clientes, principalmente en los segmentos de particulares y pequeñas empresas, y tiene una cartera de hipotecas de 34.000 millones de libras (cuota de mercado del 2% en Reino Unido) que es su joya de la corona, así como depósitos por valor de 35.000 millones de libras.
Un banco de 28 millones de clientes
Tras su integración, Santander UK pasaría a ser el tercer banco del país por saldos de cuentas corrientes de clientes particulares y el cuarto por hipotecas. En conjunto, ambos bancos darían servicio a cerca de 28 millones de clientes particulares y empresas en todo el país, según explica el banco en un comunicado.
La combinación de los dos bancos "aportaría un valor significativo para los accionistas de Santander gracias a una mayor escala en el mercado, al acceso a más hipotecas de bajo riesgo, a depósitos de mayor calidad y a las eficiencias operativas", detalla el Santander. La ratio de préstamo sobre depósitos de la entidad resultante se situaría en el 107%, frente al 108% actual de Santander UK.
La transacción generaría un retorno sobre el capital invertido superior al 20% y el retorno sobre el capital tangible del negocio conjunto pasaría del 11% de 2024 hasta el 16% en 2028, teniendo también en cuenta los planos de transformación previstos para Santander UK. El grupo prevé que la transacción genere unas sinergias del 13% de la base de costes de la entidad resultante, equivalente a como mínimo 400 millones de libras antes de impuestos.
La operación no afectará a los dividendos de los accionistas
Para ello, Santander prevé que los costes de restructuración en 2026 y 2027 asciendan a 520 millones de libras. Para el grupo, la operación tendría un impacto positivo en el beneficio por acción desde el primer año y del 4% en 2028, supondría un consumo de capital CET1 de 50 puntos básicos.
Se espera que el Santander opere con una ratio CET 1 pro forma del 13% a cierre de 2025 teniendo en cuenta la venta del 49% de Santander Polska y la correspondiente recompra de acciones a principios de 2026 anunciados el 5 de mayo de 2025, así como la adquisición de TSB. Esta operación, asegura, no afectará la política de retribución a los accionistas. Los objetivos del banco para 2025 siguen sin cambios.
El Santander presume de tener una "capacidad demostrada de integración" al haber llevado a cabo otras operaciones en este mercado, como la integración de Abbey en 2004, o de Alliance & Leicester y Bradford & Bingley en 2008. "El grupo cuenta con una trayectoria demostrada en la migración de plataformas bancarias".
En el comunicado, la presidenta de Banco Santander asegura que la compra de TSB "es un paso más en nuestra apuesta por Reino Unido y una oportunidad atractiva desde un punto de vista financiero para nuestros accionistas que está alineada con nuestros planes a largo plazo". Ana Botín cree que además, "fortalece nuestra presencia en uno de nuestros mercados principales con la incorporación de un negocio complementario y de bajo riesgo que apoya nuestra diversificación".