Los bares han cumplido con las estimaciones y han cerrado una Semana Santa positiva, pese a que la inflación ha tenido un rol determinante en el consumo. Tal y como ha afirmado este lunes José Luis Yzuel, presidente de la Asociación de Hostelería de España, los bares y los restaurantes han puesto el punto final a la Semana Santa de 2023 con “muy buena” afluencia de comensales. Como ya informó ON ECONOMIA, esta temporada es una de las más importantes para España debido a la cantidad de turistas que mueve, algo que influye de lleno sobre el ocio, dónde los bares y restaurantes tienen una posición de privilegio.
Pese a que la coyuntura económica no es boyante, la realidad es que, entre los españoles, sigue habiendo ganas de consumir, lo que confirma la recuperación de la hostelería tras la pandemia de la covid-19. A mediados de marzo, este medio informó de que tanto los bares, como también los restaurantes, vendieron un 20% más en febrero con respecto al pasado enero, una prueba que certifica que la hostelería sigue creciendo pese al azote de la inflación y del endurecimiento monetario.
Y es precisamente la escalada de los precios el único punto negativo que el presidente de la Asociación de Hostelería de España destaca. Yzuel ha lamentado una “cierta reducción en el gasto” de los consumidores debido al alza de los precios. Pese a ello, el líder de la Asociación ha constatado que la buena Semana Santa firmada por los bares y los restaurantes es el “preámbulo de las vacaciones de verano”, de las cuales se espera que la hostelería siga creciendo, aún seguir en un contexto económico complejo.
Los bares y restaurantes se benefician del crecimiento de la Semana Santa
Pese a la escalada de los precios, José Luis Yzuel explica a Efe que los últimos datos “confirman las buenas previsiones que manejaba el sector en torno a esta semana”. Además de ello, el presidente de la Asociación de Hostelería española expresa que la buena Semana Santa firmada por los negocios hosteleros, es una nueva muestra del crecimiento que “está experimentando esta festividad año tras año”.
Antes de la entrada de esta festividad, todas las estimaciones proyectaban una Semana Santa positiva, con buenas previsiones de afluencia y gastos, las cuales parecen haberse cumplido. Cabe destacar que el endurecimiento monetario y, sobre todo, la escalada de los precios ha tenido un papel protagonista sobre el consumo, el cual, pese a notar una cierta reducción, se ha movido en cotas positivas. Tal y como apuntan desde la Asociación, el gasto de este año ha sido un 5% superior al de la Semana Santa de 2022, el cual confirmó la recuperación pospandemia.
Pese a que las circunstancias económicas siguen sin ser halagüeñas, la realidad es que el ocio sigue creciendo, aupado por las ganas de consumir de los españoles. De cara a varios expertos, los consumidores aún mantienen ese factor psicológico generado a raíz del confinamiento, el cual obligó a todos los españoles a permanecer en sus hogares. Pese a que ha habido una reducción del gasto debido al alza de los precios, los datos de consumo son positivos y confirman lo estimado antes de la Semana Santa.
Sevilla factura un 10% más que en la Semana Santa 2022
Por ejemplo, en ciudades como Sevilla, dónde esta festividad tiene un peso extraordinario sobre la economía nacional, las primeras estimaciones cifran en un 10% el aumento del gasto con respecto al anterior ejercicio, tal y como informan desde la Asociación de Hostelería de Sevilla y Provincia. Por otro lado, en Madrid, pese a que también ha habido un crecimiento notable del gasto, reconocer “focos diferentes de hostelería” con zonas residenciales en los que los bares y los restaurantes “se han resentido”. Tal y como apuntan desde la Asociación, estos bares se han visto afectados por el desplazamiento de comensales a otros lugares en Semana Santa.
Pese a ello, Yzuel destaca que la tendencia general ha sido “positiva”, y más teniendo en cuenta que los precios han crecido notablemente con respecto al anterior ejercicio. Antes de la Semana Santa, ON ECONOMIA informó de que la hostelería sería uno de los sectores más respaldados por la entrada de esta festividad, tanto en la facturación, como también en la empleabilidad. Según los datos de Randstad reportados el pasado 29 de marzo, tanto los bares como los restaurantes generarían más de 69.000 empleos durante la Semana Santa de 2023. Este dato evidencia el peso que tiene esta época sobre el turismo y el ocio en España.