"La revisión de la plantilla para este año ha sido más difícil, dada la incertidumbre económica y la rápida contratación que hemos llevado a cabo durante los últimos años". Con esta declaración justificaba el director ejecutivo de Amazon, Andy Jassy, los despidos este año de 18.000 trabajadores en todo el mundo, 8.000 personas más de las que anunció el noviembre pasado.

El gigante del comercio electrónico ha comunicado la decisión por medio de un comunicado en que concreta que lo hará saber a los afectados a partir del 18 de enero y detalla que las divisiones más afectadas serán las tiendas -las Amazon Stores- y el área de recursos humanos. Con respecto al personal ubicado en Europa, la compañía ha concretado que cuando toque hablará con los órganos representativos de los empleados, y no ha determinado qué volumen de reducción efectuará. En cualquier caso, los afectados tendrán "una indemnización por despido, un seguro médico transitorio y ayuda externa para encontrar trabajo", añadía el comunicado.

A cierre de septiembre pasado, el grupo contaba con 1,54 millones de empleados en todo el mundo, una cifra que se engordó ostensiblemente durante el año de la pandemia. Solo en el 2020, se incorporaron a Amazon medio millón de personas, con un incremento anual de más del 62%, y la contratación siguió, aunque con menor mide, en los dos últimos años.

"En noviembre, comunicamos la difícil decisión de eliminar varios puestos de trabajo en nuestros negocios de dispositivos y libros, y también anunciamos una oferta de reducción voluntaria para algunos empleados en el área de Personas, Experiencia y Tecnología", recuerda Jessy, que añade que en este momento ya dijo que se esperaban más reducciones.

El primer anuncio del gigante tecnológico se hizo después de comunicar que la empresa había cerrado los nueve primeros meses del 2022 con unas pérdidas de 2.900 millones de euros (3.000 millones de dólares), ante el beneficio de 18.408 millones de euros (19.041 millones de dólares) del periodo que fue de enero a septiembre del 2021. De su lado, la facturación fue de 166.642 millones de euros (172.370 millones de dólares), un 1,2% más.

Salesforce y la versión china de TikTok

Amazon no es la única tecnológica afectada por|para la contracción de la economía mundial a lo largo de 2022 y la incertidumbre que hay sobre el crecimiento global en este 2023 que se acaba de empezar. Este miércoles, la también norteamericana Salesforce hará un recorte de aproximadamente un 10% de la plantilla, cosa que supondrá unos 8.000 despidos, dentro de un plan de reestructuración para reducir los costes y mejorar los márgenes operativos. La empresa dedicada a herramientas de software por atención al cliente apuntaba que el coste de este plan superará los 2.000 millones de euros.

Estos anuncios se suman a los ya avanzados hace meses por otros gigantes tecnológicos. Es el caso de Meta (grupo propietario de Facebook, Instagram y WhatsApp) que suprimirá 11.000 puestos de trabajo, el 13% de la plantilla, por todo el mundo. También Twitter aplicó a principios del pasado noviembre un ajuste en la plantilla de cerca de la mitad de los trabajadores, es decir, cerca de 4.000 personas.

Para la matriz china de la red social TikTok las cosas tampoco van demasiado bien en materia laboral: la matriz ByteDance ha realizado un goteo de salidas a lo largo del 2022, de cientos de trabajadores, según la prensa china. Estas informaciones apuntaban a que el objetivo del plan respondía a la intención de simplificar las operaciones de la empresa y que afectó directamente a empleados de Douyin –versión china de TikTok– ya otros departamentos como el dedicado a videojuegos o el de inmobiliaria.

También se aferró al "reequilibrio organizativo" la multinacional Cisco para argumentar un recorte del 5% de la plantilla mundial, que suma 83.000 trabajadores, con un plan valorado en 580 millones de euros. Entre las actuaciones que ello conllevará, la compañía mencionó que podrá ajustar sus activos inmobiliarios y realizar un ahorro de costes.

Un reciente informe de Goldman Sachs, atribuye la ola de despidos a las tecnológicas a un “desafortunado efecto secundario” de la ralentización en el crecimiento de los ingresos de estas compañías, a medida que la economía se normaliza después de la pandemia, y que las valoraciones de las tecnológicas se han visto afectadas de forma desproporcionada por la subida de tipos de interés.

Se da la paradoja de que el propio banco estadounidense Goldman Sachs prevé llevar a cabo una reducción del 8% de los 49.000 trabajadores de la plantilla mundial. El pasado mes de octubre, el banco anunció una "reordenación" de sus negocios, después de que el beneficio neto atribuido del tercer trimestre de 2022 cayera un 44% frente al resultado del mismo periodo del año anterior, hasta 2.962 millones de dólares (2.783 millones de euros).