El gestor aeroportuario Aena ultima el proyecto de ampliación del Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol, que contempla casi duplicar la superficie actual del área terminal, que pasaría de 80.000 metros cuadrados a 140.000, para mejorar la capacidad y calidad.
En la propuesta no estarán el edificio de la antigua terminal 1 y los actuales diques B y C, que serán demolidos, según ha informado Aena en un comunicado.
El presidente y consejero delegado de Aena, Maurici Lucena, ha presentado este viernes la propuesta al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y al presidente de la Diputación, Francis Saladado, en una reunión celebrada en el Ayuntamiento de la capital malagueña.
El inicio de este proyecto se incluirá en la propuesta del llamado DORA III (Documento de Regulación Aeroportuaria), que arrancará en 2027.
Para dar forma a la futura área terminal, se prevé adecuar su capacidad a la demanda esperada mediante la construcción de un nuevo dique para tráfico no Schengen, con control de frontera centralizado.
Además, se prevé incrementar las posiciones de contacto para mejorar la calidad del servicio a las compañías y al pasajero, una mayor superficie para el control de seguridad y el rediseño del sistema de tratamiento de equipajes, entre otras actuaciones.
La ampliación de los espacios en el área terminal facilitará todos los procesos desde la llegada al aeropuerto hasta el embarque y el proceso inverso.
Las superficies dedicadas a la actividad comercial en la terminal se ampliarán un 41 por ciento, aparte del 43 por ciento más de espacio destinado a salas VIP.
En el campo de vuelo, se construirán nuevas calles de rodaje, que permitirán mejorar la circulación de los aviones.
En los exteriores, la propuesta plantea la mejora de la urbanización y de los accesos, y un incremento de la capacidad de los aparcamientos y la optimización de sus usos.