Elon Musk, propietario único de Twitter, ha asegurado a sus empleados que el valor de la empresa ha caído a los 20.000 millones de dólares, menos de la mitad de los 44.000 millones que él pagó en octubre. En una nota interna enviada a sus trabajadores, el magnate afirma que Twitter se está “transformando a tal rapidez” que puede ser ahora considerada como “una start-up a la inversa”.

El multimillonario, que desde que llegó a la red social ha reducido a casi un cuarto su personal y ha vendido gran parte del mobiliario de la sede central de San Francisco, no ha podido evitar perder una gran cantidad de anunciantes, fuente principal de ingresos de la compañía, y tampoco su nuevo Twitter Blue que pagó parece haber mejorado las cosas.