El Tesoro Público español ha colocado este jueves 6.509 millones de euros en cuatro denominaciones distintas de bonos y obligaciones del Estado, entre ellas, unas a 20 años, cuyo interés marginal ha superado el 4%. En estas obligaciones, a veinte años, el Tesoro ha vendido 2.118 millones de euros, a un interés marginal del 4,007%, superior al 3,654% previo.

Por otro lado, en otras obligaciones con una vida residual de cinco años y dos meses, el importe adjudicado ha sido de 1.482 millones de euros. En este caso, el rendimiento ha sido del 3,097%, también superior al 2,937 % anterior. El Tesoro también ha adjudicado este jueves otros 1.603 millones de euros en unos bonos con una vida residual de dos años, a un interés marginal del 3,071%, igualmente superior al 2,949% previo. Por último, el Tesoro ha colocado 1.306 millones de euros en un bono a cinco años. En este caso, el interés marginal aplicado ha sido inferior. En concreto, ha alcanzado el 3,043%, frente al 3,087% aplicado en la puja previa.

La demanda ha alcanzado los 10.229 millones de euros

El importe colocado este jueves, esos 6.509 millones de euros, se ha situado en la parte alta del objetivo previsto por el Tesoro, que oscilaba entre los 5.500 y los 6.500 millones de euros. La demanda por parte de los inversores ha alcanzado los 10.229 millones de euros, 1,5 veces el importe adjudicado.

En la anterior subasta celebrada por el Tesoro, este martes, España vendió 1.997,58 millones de euros en letras a tres y nueve meses a tipos de interés marginales más elevados, y con una demanda que superó los 6.000 millones. El interés marginal de las letras a tres meses fue del 3,09%, el mayor desde noviembre de 2011, y el de las letras a nueve meses, del 3,222%, el más alto desde que en 2013 empezó a venderse deuda con este plazo.

Deuda a corto plazo

El mantenimiento de los elevados intereses ofrecidos, en línea con las últimas subidas de los tipos de interés por parte del BCE, ha mantenido el apetito inversor de los mercados por los títulos españoles, especialmente por la deuda a corto plazo.

La emisión se produce así en un momento en el que los inversores particulares están mostrando gran interés por la compra de deuda, principalmente a corto plazo, dada su alta rentabilidad, que ha ido creciendo desde inicios de 2022, especialmente en el caso de las letras a más corto plazo. La emisión bruta por parte del Tesoro Público será este año de 256.930 millones de euros, lo que supone un aumento del 8,2% respecto a lo estimado para 2022, debido al alza de los tipos de interés.

Por su parte, el endeudamiento neto del Tesoro Público en 2023 se mantendrá en 70.000 millones. Desglosando por tipo de instrumento, se prevé que las Letras del Tesoro aporten financiación neta negativa por 5.000 millones, por lo que los bonos y obligaciones del Estado, junto con el resto de las deudas en euros y en divisas, aportarán los 75.000 millones restantes.