El mejor consejo que subrayan siempre desde el Colegio de Economistas de Catalunya es gastar lo que los ahorros permitan. Es decir, tanto si el gasto se basa en el ocio, las inversiones o la compra de un inmueble, siempre se tienen que medir en base a lo que nos queda después y cuyos ahorros disponemos: no invertiremos si nos tenemos que quedar en cero, como tampoco nos marcharemos de viaje si eso nos supone un esfuerzo y unas consecuencias para llegar a final de mes. A partir de aquí, sí se desprenden algunas recomendaciones del cómo salir por Semana Santa, sin tocar de forma notoria nuestros ahorros:
Elección del alojamiento
Tienes muchas opciones por escoger cuando se trata de alojamiento en Europa. Los encontraréis todos, desde complejos turísticos de gama alta hasta dormitorios económicos y todo lo que hay en medio. Es posible que os inclinéis a reservar la opción de alojamiento más barata en línea. Aun así, si queréis unas vacaciones europeas baratas, tenéis que esforzaros un poco más en vuestra búsqueda. Primero, piensa qué quieres hacer en la zona. Si queréis explorar los principales lugares de interés, lo mejor es quedaros en el centro de la ciudad. En caso contrario, gastaréis más dinero para ir a la ciudad diariamente en transporte público. Tened en cuenta también vuestras opciones de alojamiento. Los apartamentos y los hostales suelen estar equipados con cocina. Así podéis ahorrar un puñado de dinero cada día preparando vuestras comidas en casa.
Alimentos y bebidas
Escoged sitios donde realmente sean unos amantes de la cocina que pueden degustar restaurantes tradicionales centenarios. Eso sí, todo el mundo quiere probar una pizza en Roma o un buen vino en Burdeos. Desgraciadamente, es difícil probar los sabores locales cuando vas de vacaciones baratas en una ciudad turística. Pero con unos cuantos consejos y trucos, podéis degustar una cocina deliciosa y auténtica con un presupuesto económico en cualquier ciudad. El primer paso es evitar comida en los restaurantes situados dentro o cerca de atracciones turísticas. Solo se dirigen a los turistas. No come ninguna gente local. Eso quiere decir que los precios son más altos que en otros lugares y que vuestras papilas no degustarán los mejores platos de la región. Quizás la mejor manera de comer en una ciudad es ir a los mercados locales. Podéis comprar ingredientes frescos e ir a un parco o a una playa para hacer un pícnic o una barbacoa. Si no hay sol, podéis preparar una comida a la cocina de vuestro apartamento.
El mejor momento para viajar
Hay 52 semanas al año y el precio varía en función de la que escogéis para ir de vacaciones. La flexibilidad es la clave|llave para hacer un buen negocio. Si podéis viajar entre semana, el precio de los vuelos y las habitaciones será mucho más bajo. Como ventaja, los lugares turísticos estarán menos concurridos y las calles no estarán llenas de turistas. La temporada baja es el momento perfecto para viajar. Son abril-mayo y septiembre-octubre. Durante estos periodos, los precios de los vuelos y de las habitaciones pueden bajar un 40% y todavía podréis disfrutar de un tiempo agradable. Un buen consejo es investigar si habrá acontecimientos especiales durante el tiempo que queréis viajar. Visitar Irlanda el día de San Patrick no hará ningún favor en vuestra cuenta bancaria.
Escoger el mejor método de pago
19 miembros de la UE utilizan el euro, pero hay 29 monedas en todo el continente. Si abrimos fronteras, el tema ya es extremadamente diverso. Necesitaréis tres monedas para viajar desde la República Checa a Austria pasando por Hungría. Por lo tanto, cambiar las monedas se puede complicar en un viaje prolongado. Desde la pandemia global, la mayoría de las instituciones bancarias se han cambiado a la moneda digital. Ahora puedes pagar con tarjeta a la mayoría de países cuando viajas por Europa.
Hay infinidad de proveedores de tarjetas de crédito o tarjetas Visa prepagadas. Pero para ahorrar dinero fácilmente, echa una ojeada a las ofertas de Easy Money o Easy Green, no pagaréis comisiones cuando gastáis en el extranjero. Y eso no es todo, también podéis guardar vuestro dinero en 16 monedas diferentes y evitar las fluctuaciones de la moneda.
El mejor transporte
Las numerosas opciones de transporte hacen de Europa la capital mundial de la mochila. Podéis llegar fácilmente a casi cualquier país con tren, avión o autobús, estés donde estés. El Interraíl Pass es popular entre los europeos y las personas que vienen de fuera del continente. Este es un billete todo en uno que te permite viajar en tantos trenes como quieras. Es una opción conveniente, pero podríais ahorrar dinero si primero os tomáis el tiempo para considerar todas vuestras opciones. Hay muchas compañías de autobuses que operan como Flixbus, la más popular. Podéis encontrar rutas entre ciudades populares como Viena y Praga por solo 9,99 €. Una vez hayáis decidido vuestro itinerario, aseguraos de considerar todas las opciones para ir del punto A al punto B.
El lugar
Podría ser el primer punto, pero se entiende que es la opción más personal con la cual os acondicionará el resto de características. La elección de vuestro destino es la que tiene más impacto en vuestro presupuesto de viaje. Es tentador seguir las multitudes y visitar los pueblos turísticos tradicionales. Pero aseguraos de explorar un área que os guste realmente en lugar de ir a algún lugar solo para decir que habéis estado. Europa del Este es una región fantástica para empezar tu aventura. Según World Population, seis naciones del este se encuentran entre los siete países más baratas. Las ciudades no solo son asequibles, sino que también son algunas de las más fascinantes.