El Gobierno ha aprobado una modificación legislativa para prohibir trabajos al aire libre durante alertas por temperatura con el objetivo de evitar muertes por golpes de calor. Las medidas han sido aprobadas por el Consejo de Ministros este jueves y estarán recogidas en un real decreto ley. El paquete de medidas urgentes de apoyo al sector agrario se enmarcan en la lucha contra la prolongada situación de sequía y al agravamiento de las condiciones del sector primario a consecuencia de la guerra en Ucrania.

El ministro de Agricultura, Luis Planas, ha explicado que el cambio establece la "prohibición de tareas en determinadas condiciones" cuando la situación meteorológica sea "adversa" y haga muy "penosa" la tarea con riesgo para la salud.

El ministro ha concretado que la norma que se modificará es el Decreto 486/1997 sobre condiciones mínimas de seguridad y salud en los puestos de trabajo. Actualmente, la norma sí que especifica las temperaturas en interiores, pero no lo hace en los exteriores. De esta manera, las restricciones se aplicarán cuando el AEMET declare un aviso naranja o rojo por las altas temperaturas o haya fenómenos climatológicos adversos.

Sectores afectados

El titular de Agricultura ha remarcado que es un "tema muy preocupante" y que el ejecutivo no se limita a aplicarlo a "puestos de trabajo con un alta carga física como la agricultura o la construcción" sino que tiene una perspectiva "horizontal en el conjunto de la economía, donde las condiciones de penosidad por elevación de temperaturas son muy significativas". Paralelamente, Planas ha subrayado que lo que hace este decreto es hacer "más estrictas" las condiciones en relación con este tema y, por lo tanto, dar una "alerta adicional".

Según avanzó este miércoles la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se verán afectados los trabajadores de la agricultura, la construcción y la obra pública, la hostelería, los jardineros, basureros, el sector de la mensajería y carteros y los repartidores (riders) y algunas posiciones del ramo del turismo como los guías, entre otros.

Muertes por olas de calor

De cara a la adopción de las medidas preventivas, las compañías tendrán que realizar una evolución de riesgos laborales que tendrán en cuenta tanto las características individuales de los trabajadores como las de los trabajos que se desarrollan. Según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la media de las temperaturas registradas entre el 1 de junio y el 31 de agosto de 2022 fue la más alta desde el comienzo de la serie histórica.

El Departamento de Yolanda Díaz, citando estimaciones del sistema de monitorización de mortalidad diaria del Instituto de Salud Carlos III, ha argumentado que durante el verano del año pasado se produjo en España un incremento de más de 4.800 muertes atribuibles a la temperatura.

De hecho, entre otros casos, Trabajo ha recordado que las altas temperaturas costaron la vida a un trabajador de 60 años que hacía tareas de limpieza vial en Vallecas (Madrid), y a otro trabajador del campo de Murcia, en Lorca, "que ni siquiera tenía a su disposición agua o medio de hidratación alguno".