El Banco Santander y el BBVA se han sumado a las nuevas medidas de alivio hipotecario aprobadas por el Gobierno la semana pasada. El objetivo de ambas entidades bancarias es ayudar a más de un millón de familias vulnerables o en riesgo de exclusión por la subida del euríbor. En el caso del Banco Santander, el consejo de administración dio el visto bueno este martes para adherirse al nuevo Código de Buenas Prácticas para deudores hipotecarios, justo una semana después de que el Consejo de Ministros aprobara las medidas, que incluyen desde reestructuraciones, hasta alargamiento del plazo o carencias. Según avanza EFE, está previsto que el consejo de administración del BBVA apruebe también a la incorporación al nuevo Código de Buenas Prácticas, algo que previsiblemente hará el conjunto del sector.
De hecho, solo un día después de que el Consejo de Ministros aprobara las medidas de alivio, la presidenta de la patronal bancaria AEB, Alejandra Kindelán, anunciaba la "voluntad" de adherirse al acuerdo de las principales entidades de esta asociación, entre las que se encuentran el Santander, BBVA, Bankinter y Sabadell. Según sus palabras, el acuerdo sobre las medidas hipotecarias era "muy importante" para el sector, que muestra "una vez más" el compromiso de la banca española "con las personas", en especial con las que tienen "más dificultades para asumir la subida de los tipos de interés en las cuotas hipotecarias". No obstante, fue CaixaBank la primera entidad en sumarse oficialmente a las medidas, ya que su consejo de administración se reunió el pasado jueves para aprobar su adhesión.
Medidas de alivio para los hipotecados
En este sentido, el Banco de España ha aplaudido las medidas de alivio para los hipotecados aprobadas por el Gobierno, puesto que son "temporales" y "selectivas", pues se dirigen a las familias que puedan verse más afectadas por el alza del euríbor, dos condiciones claves para la estabilidad financiera. El director del departamento de Estabilidad Financiera y Política Macroprudencial del Banco de España, Carlos Pérez Montes, ha elogiado que las medidas cuenten con estas dos condiciones durante su intervención en un encuentro organizado por la AEB y CUNEF sobre el impacto de las subidas de los tipos de interés sobre las hipotecas.
Según ha explicado, la reestructuración de hipotecas puede ayudar tanto a los hogares como al sector bancario, que reduce el coste de provisiones, pero además, otras soluciones como extender el plazo de las hipotecas o congelar la cuota durante un periodo de tiempo contribuirán a mejorar la liquidez de muchas familias. El experto del Banco de España confía en la capacidad de resistencia del mercado hipotecario siempre que el empeoramiento de la situación económica no lleve aparejado un deterioro del empleo y un aumento del paro.
En el mismo encuentro, el secretario general de la AEB, Javier Rodríguez Pellitero, ha destacado que la situación de partida frente a crisis anteriores es muy diferente, con una menor endeudamiento de las familias, pero ha celebrado que se cuente ya con "soluciones" por si el encarecimiento de las hipotecas se convierte en un problema. Minutos antes, en el mismo foro, Íñigo Fernández de Mesa, vicepresidente de la CEOE, había planteado que el Gobierno también tenía en su mano la opción de ayudar directamente a los hipotecados vulnerables, teniendo en cuenta los ingresos récord del Estado en lugar de "trasladar el problema al sector".
Los precios del alquiler siguen al alza
El catedrático de Economía de la Universidad Pompeu Fabra, José García Montalvo, ha insistido en que los bancos están trasladando la subida de los tipos de interés del BCE de forma lenta a las hipotecas y ello, unido a que cree que los precios del mercado inmobiliario se mantendrán, le hace pensar que la demanda de crédito no se resentirá. "Creo que el impacto de los tipos en la demanda hipotecaria será pequeño", ha resumido antes de valorar igualmente las medidas de alivio hipotecario para estar preparados por si surge el problema y las familias no pueden hacer frente a sus hipotecas.
En la misma línea, la secretaria general de la Asociación Española de Análisis de Valor, Paloma Arnaiz, se ha mostrado optimista sobre la evolución de la demanda de crédito hipotecario, aunque ha admitido que la subida de los tipos de interés puede dejar fuera a algunos potenciales compradores de vivienda. Teniendo en cuenta el perfil de los demandantes de hipotecas de los últimos años, piensa que algunas familias podrían optar por adquirir inmuebles de un precio menor para ajustar sus cuotas o los que no tengan una necesidad acuciante y lo hagan por invertir, esperar algo más de tiempo. En cualquier caso, sostiene que la demanda de crédito para comprar vivienda como inversión se mantendrá porque los precios del alquiler están al alza. Su conclusión, por tanto, es que la actividad hipotecaria se mantendrá "en niveles sanos y razonables".