Tener un coche ecológico es cada vez más inasequible por la tecnología que precisa para poder cumplir con las normas de emisiones comunitarias. Un dato lo dice todo: el año pasado, el precio de los coches que no sobrepasan los 120 gramos de CO2 emitidos por kilómetro subió un 11,4% hasta 21.042 euros, 2.154 euros más que en 2021. En este segmento se incluyen modelos de combustión con precios muy bajos que suben muy poco respecto a 2021, pero irrumpen con fuerza los eléctricos y los híbridos que son mucho más caros de serie, pero que además han crecido este año un 22%, frente al 8% del mercado. Tres veces más, según los datos de la Agencia Tributaria obtenidos del Impuesto Especial para Determinados Medios de Transporte (IEDMT), conocido como el Impuesto de Matriculación y que se abona al adquirir un turismo nuevo.
Sin embargo, el precio fue mucho más comedido entre los menos ecológicos ya que los que emiten entre 120 y 160 gramos aumentaron 273 euros (1,3%) hasta colocarse en 21.408 euros y los más contaminantes, los que sobrepasan los 200 g -coches muy potentes y generalmente de lujo- subieron 2.570 euros hasta 40.460 euros, aunque en porcentaje fue el 6,8%, la mitad que las coches más limpios. Incluso el segmento entre 160 y 200 gramos redujo su precio un 1%, con una caída de 306 euros y un coste de 29.335 euros.
Fuentes de Faconauto, la patronal de los concesionario, explican a ON ECONOMIA que el incremento del precio medio de los vehículos el año pasado confirma la tendencia que se viene arrastrando en los últimos ejercicios, “donde hemos pasado de los 27.497 euros de media en 2019 a los 33.750 de 2022”, unos precios que difieren de los que maneja Hacienda, pero que reflejan la misma tendencia alcista. Los concesionarios achacan parte del crecimiento de los precios del pasado año al incremento en los precios de las materias primas, acentuado por la guerra de Ucrania, pero matizan que en el trasfondo de esta tendencia está el desarrollo tecnológico que están llevando a cabo los fabricantes para acelerar en la descarbonización de sus modelos, por eso el tramo de los menos contaminantes, exentos de impuestos, crece: se trata de vehículos con un precio medio más elevado.
Nuevo sistema de emisión
Cómo apuntan desde Faconauto, la mayor parte de la fuerte subida del año pasado se explica por el cambio en la medición de las emisiones de CO2, el nuevo estándar WLTP (Worldwide Harmonized Light Vehicles Test Precedure) que ha elevado los umbrales a partir de los cuales un vehículo ya no se considera de bajas emisiones. El 1 de enero de 2022 entró en vigor en España el WLTP provocando que un mismo coche que antes de 2022 se homologaba con unas emisiones por debajo de los 120 g haya subido “legalmente” a emitir entre 10 y 20 gramos más dependiendo de la motorización. Eso ha provocado que coches baratos que antes eran considerados ecológicos ya no estén en esta categoría y, a cambio, han entrado coches mucho más caros con tecnologías eléctricas e híbridas.
Para hacerse una idea de la dimensión del cambio, en 2021 del total de turismos vendidos en España el 61% (548.532) se les catalogaba como ecológicos lo que les eximía de abonar el Impuesto de Matriculación (IEDMT). Pues en 2022 el porcentaje se ha reducido al 43% (375.426 coches). Pero el pago del impuesto nada tiene que ver con el fuerte incremento del precio de estos coches, pues están exentos al no superar los 120 gramos. El precio ha subido porque en este segmento han entrado los turismos con tecnologías limpias imprescindibles para cumplir con la normativa comunitaria de emisiones
5.550 euros, un 22% más
De momento estos coches son escasos, 48.109 el año pasado, con una cuota del 5,5% del total de los coches que contabiliza Hacienda. Sin embargo, su precio medio se colocó el pasado año en 30.575 euros, 5.550 euros más que el año anterior y un incremento del 22%. No obstante, apenas suponen el 12,8% de los coches con emisiones inferiores a los 120 g y el resto son coches de muy poca cilindrada, por debajo de los 1.400 centímetros cúbicos, en la gama más baja y generalmente gasolina, con un precio que ronda los 15.500 euros. Estos coches baratos explican que de momento los modelos más ecológicos sigan siendo, de media, los más baratos del mercado. Algo que irá cambiando según vayan cobrando peso los eléctricos e híbridos.
Subidas por CCAA
El precio medio de los coches vendidos en España el pasado año fue de 22.176 euros (21.432 si se descuenta el impuesto de matriculación) con una subida del 8% sobre 2021. Sin embargo, el tipo de coche que se suele adquirir en cada comunidad autónoma marca considerables diferencias. Los más caros se matricularon en Cantabria con un precio de 25.266 euros y un aumento del 10,7% sobre el año anterior. Después va Aragón con 24.107 euros y una subida del 14,8%, la Comunidad de Madrid, 23.600 euros y el 6,7%, y en cuarto lugar Catalunya donde de media se compraron coches de 23.262 euros, un 10% por encima de 2021.
En la Región de Murcia estuvieron los precios más bajos, 18.764 euros con un aumento del 1,7%; en Canarias costaron 19.749 euros y un alza del 10,1% (aunque en el archipiélago los impuestos son más bajos) y en tercer lugar la Comunidad Valencia donde se abonó de media 20.473 euros con un incremento del 12,5%.