Tanto el Gobierno español como el Govern de la Generalitat afrontan la recta final de 2025 sin nuevos presupuestos aprobados y ni siquiera se han llevado a votación del Congreso y el Parlament, respectivamente, ante la falta de acuerdo con el legislativo. Esta situación, que los aboca a gobernar con unas cuentas que son prórroga de la prórroga de las cuentas aprobadas en 2023 por ambas administraciones, tiene unos riesgos que este lunes han expuesto en el Círculo de Economía la presidenta de la Airef, Cristina Herrero, el exministro del PSOE Jordi Sevilla y el exsecretario de estado de Hacienda Alberto Nadal, del PP.
La principal responsable de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, que analiza la recaudación y gasto de la administración, ha señalado que la prórroga es "positiva" porque "permite la continuidad de la actividad y las políticas públicas", pero ha alertado de los riesgos que tiene hacer de la excepción una norma. Nadal ha expresado que existe un problema de "credibilidad" si la prórroga del equilibrio de poderes si no hay presupuestos porque la prórroga es "una solución excepcional". Y Sevilla se ha sumado a las críticas y ha añadido que la de Pedro Sánchez puede ser "la primera legislatura sin presupuestos".
Herrero ha recordado que "la prórroga no exime al gobierno español de presentar un proyecto de presupuestos", que debían estar para el pasado 30 de septiembre, y ha expresado que "esto debilita la fortaleza institucional". En primer lugar, porque los presupuestos son "la principal herramienta de política económica" y "el ciudadano debe conocer los planes del gobierno español". "Una prórroga exime a los ciudadanos del control sobre aquello que escogió en las urnas y también del control parlamentario", ha añadido.
Más allá de la fortaleza institucional, las prórrogas tienen "un impacto en la inversión, porque algunas dependen de la estabilidad y la seguridad del país", ha recordado.
La prórroga es "una renuncia por adelantado a llegar a acuerdos y consensos" y "obliga a hacer después acuerdos puntuales", ha dicho Herrero, que ha alertado que "esta filosofía está entrando en el ámbito europeo", ya que este año hay más países que se han sumado a la moda de las prórrogas presupuestarias. "Se flexibilizan los supuestos en los que no se deben presentar. Se está normalizando en el ámbito europeo una práctica que en 2024 solo hizo España", ha dicho.
La falta de presupuestos deja a España sin objetivo de estabilidad, "y la única referencia es la regla de gasto y la prioridad de la regla de déficit", ha señalado. "El marco institucional presupuestario debe ser claro y conocido, que se conozcan las reglas del juego, y esto no ocurre", ha dicho Herrero, que además ha lamentado que "si no se puede pensar a un año vista, ya no hablamos del medio plazo, a 3 o 4 años", una previsión importante teniendo en cuenta que "España es uno de los 5 países con una ratio de deuda superior al 100% de su PIB".
La Airef recomendó en el informe del pasado mes de julio que presentara un proyecto de presupuestos y el ministerio de Hacienda les respondió que había "factores" como los aranceles, el aumento del gasto en Defensa, los precios energéticos y las catástrofes naturales que aconsejaban prudencia. Herrero ha cuestionado las explicaciones porque "muchos de estos factores seguirán afectando en escenarios a cinco años vista".
En contraste con el gobierno español, Cataluña sí que ha presentado datos con el informe de orientaciones presupuestarias "para confrontar si la prórroga puede estar teniendo o no impacto", ha señalado Herrero.
De todas maneras, los presupuestos del estado tienen poco margen porque dedican un 58% a transferencias a otras administraciones, autonómicas y Unión Europea, y un 12% se dedica a clases pasivas e intereses por un 15% a sueldos de funcionarios.
"La ministra Montero tiene razón en que a corto plazo las finanzas públicas presentan un balance positivo", ha concedido Herrero, que ha señalado que han rebajado una décima la previsión del déficit al 2,6%. La buena recaudación, que crece un 12% por rentas, sociedades, IVA y crecimiento económico, favorece además un crecimiento económico que la Airef prevé al alza después de que los efectos de la guerra comercial no hayan sido tan fuertes como se esperaba.
El exsecretario de Estado Alberto Nadal ha insistido en que "el gobierno español tiene la obligación constitucional de presentar presupuestos antes de septiembre". Y ha recordado que la prórroga "está prevista como una solución excepcional" y no "para estirar las cuentas como un chicle y no someterse a control parlamentario". "Me genera muchas dudas esta invasión del ejecutivo al parlamentario"; ha añadido.
Con la prórroga, ha dicho, "no hay marcos de referencia para controlar si el gasto se lleva a cabo o no" y tampoco para controlar el déficit público. "No hay una visión a corto o largo plazo", ha completado. Y ha recordado que no es solo una prórroga, sino una "prórroga de una prórroga".
El exministro Sevilla, aunque ha dado la razón a sus colegas sobre los efectos negativos de las prórrogas presupuestarias, ha recordado que "a pesar de ello, las agencias de rating revisan al alza la valoración de la deuda" y "la economía funciona bien".
Sevilla ha criticado que las prórrogas "restan poder democrático a los parlamentos" y ha detallado que "no es lo mismo prorrogar el presupuesto que no presentar presupuestos". Ahora bien, lo ha atribuido en gran parte a una "polarización" en la que los insultos están a la orden del día y "nadie se plantea pactar".