La quiebra de Silicon Valley Bank ha inundado de dudas el mercado financiero internacional. El pasado viernes saltaban todas las alarmas después de que la entidad bancaria californiana retrocediese en Wall Street y los reguladores decretasen la bancarrota de esta. Tras ello, todo lo que se ha sucedido han sido transacciones movidas por el temor a un colapso financiero global y el miedo a un efecto contagio que, por el momento, los Gobiernos internacionales descartan. Todo parte de que el desastre de SVB es el segundo más abrupto de la historia financiera de Estados Unidos y el más importante desde la crisis de 2008.

Ante estos antecedentes, el Gobierno alemán ha rechazado este lunes comparar la situación actual del banco y lo que ha generado la quiebra en los mercados internacionales con la crisis financiera de 2008. El Ejecutivo liderado por Olef Scholz valora el escenario y está pendiente de los acontecimientos que se han sucedido en las últimas horas. Las autoridades alemanas están estudiando de cerca el caso junto al supervisor germano, BaFin, y con el Bundesbank, el banco central del país.

Alemania no cree que la situación se asemeje a la crisis de 2008

Preguntados por una hipotética situación similar a la vista en 2008, el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Hebestreit, ha expresado que “no creo que estemos en una situación a la de entonces”. Tras ello, el miembro del Ejecutivo germano ha añadido que “en este momento, rechazamos tales comparaciones históricas”. Pese a que la situación, por el momento, no es tan desmesurada como lo fue la crisis financiera de 2008, sí que existe preocupación entre los inversores. Y es que, la repercusión y calado de la quiebra de SVB va más allá de Estados Unidos. Este banco opera en varios países más allá EE. UU., como en Alemania o Reino Unido.

Por el momento, este lunes se ha conocido que HSBC, el banco más grande de Europa, ha adquirido la filial británica de Silicon Valley Bank por una libra en la que ha sido una operación “excelente” desde el punto de vista estratégico, tal y como han expresado desde el banco. Por su lado, en Alemania han decretado el cese de operaciones de la filial de la entidad bancaria quebrada. Con respecto al efecto que podría generar sobre los ciudadanos, el portavoz del Gobierno alemán ha explicado este lunes que “debemos tener cuidado de no provocar lo que queremos evitar, y en ese sentido pediría que se esperara a ver”.

Scholz conoce la situación de Silicon Valley Bank

Hebestreit ha asegurado que el canciller alemán, Scholz, conoce el caso de SVB y “está informado de la situación que se ha producido en los últimos días en Estados Unidos y, en particular, en California”. El colapso de Silicon Valley Bank ha calado de lleno en los mercados bursátiles de todos los países, entre ellos el DAX 30, índice de referencia en el mercado alemán, el cual camina con un retroceso del 3,25%, lastrado por los augurios negativos que provienen desde Estados Unidos, dónde se tiene confianza en el sistema bancario, pero han comenzado a salir nuevos rumores de bancos que podrían quebrar.

Es por ello por lo que Nodjinan Nimindé-Dundadengar, portavoz alemán de Finanzas, ha indicado que tanto BaFin como Bundesbank están analizando de cerca lo acontecido en el país americano. Además de ello, el titular de Finanzas ha recalcado que el comité de estabilidad financiera “analiza constantemente los posibles riesgos para la estabilidad de los mercados, incluidas las consecuencias del giro de los tipos de interés”. En este punto conviene recordar que el próximo 16 de marzo se reúne el Banco Central Europeo, que prevé elevar los tipos en 50 puntos básicos, tal y como adelantó en la última cita monetaria.

BaFin ha cesado las operaciones de la sucursal alemana de SVB

En cuanto a la filial de Silicon Valley Bank en Alemania, el BaFin ha informado este lunes de que ha ordenado una moratoria sobre la sucursal germana del banco estadounidense “debido al peligro que existe para el cumplimiento de las obligaciones frente a los acreedores”. Esta implica la prohibición de ventas y la suspensión de la relación con sus clientes, es decir, el cese de operaciones.

BaFin explica que la sucursal alemana “no tiene relevancia sistemática” y precisa que la moratoria tuvo que ser declarada “para salvaguardar los activos en un proceso ordenado”, el cual se extenderá hasta que se aclare el panorama en Estados Unidos.

Además, explica que la situación en la que se encuentra ahora la filial alemana, que realiza actividades de préstamo, pero no operaciones de depósito, "no supone una amenaza para la estabilidad financiera" ni la moratoria tiene consecuencias para la garantía de depósitos en Alemania.