La economía española creció un 5,5% en el conjunto del pasado año, aunque fue de más a menos con un marcado debilitamiento. En términos interanuales, el PIB aumentó un 2,6% en el último trimestre el año, muy por debajo del 4,7% del tercer trimestre, y del 7,8% del segundo y el 6,6% del primero, según los datos publicado este viernes por el INE que ha rebajado el crecimiento interanual en una décima, frente al 2,7% del avance de la Contabilidad Nacional publicado en enero. Las exportaciones cogieron el relevo frente a 2021, pues de los 5,5 puntos de subida aportaron 2,4 puntos (2,1 puntos por encima del año anterior), mientras que la demanda nacional contribuye con 3,1 puntos (2,4 puntos por debajo de 2021).

 

Una desaceleración que queda patente en la evolución intertrimestral, aunque con un resultado mejor de lo esperado por los analistas. Así, el cuarto trimestre repitió el crecimiento del 0,2% que tuvo la economía en el tercer trimestre, cuando se llegó a especular con una posible caída. Lejos, no obstante, del comportamiento del PIB en primavera, que se incrementó en términos intertrimestrales el 2,2%, aunque hay que tener en cuenta que el primer trimestre supuso un fuerte frenazo, con un 0,0% del PIB.

En el cuarto trimestre se produce un agravamiento en el consumo de los hogares, que desciende un 0,8% en términos trimestrales, y en la inversión de las empresas que cayó un 1,2%, lo que arroja un saldo negativo del 0,9% para la demanda nacional, en parte compensado por el aumento del 1,9% del gasto de las administraciones públicas. El trimestre se salva gracias al descenso del precio internacional de la energía, lo que permitió que las importaciones cayesen un 4,2% cuando en el tercer trimestre aumentaron un 3,2%. En cambio, las exportaciones descienden a un menor ritmo, el 1,1% en el cuarto trimestre, lo que ha permitido un saldo exterior positivo para la economía nacional en otoño pasado.

Crecimiento mayor al pronosticado por el Gobierno

La economía española, que ha repetido el crecimiento del año anterior, se coloca en la mayor tasa desde 1973 y supera en 1,1 puntos el pronóstico del Gobierno (4,4%). Las elevadas tasas de inflación registradas en 2022, que llegaron a superar los dos dígitos en el verano, llevaron a las familias a moderar su gasto. Así, el consumo de los hogares creció el año pasado un 4,5%, tasa 1,5 puntos inferior a la de 2021. Por su parte, el gasto público se contrajo un 0,7% en 2022, registrando su primer descenso anual desde 2014, mientras que la inversión se disparó un 4,6%, su mayor repunte desde el ejercicio 2018, cuando subió un 6,3%.

Por sectores económicos, sólo la agricultura recortó su valor añadido bruto en 2022, con un descenso del 1,1%. Los servicios registraron un alza del 6,5%; la construcción, del 4,1%, y la industria, del 3%. A precios corrientes, el PIB de 2022 se situó en 1.327.108 millones de euros, un 10% más que en 2021. En el cuarto trimestre de 2022, alcanzó los 344.558 millones de euros, la cifra más elevada en cualquier trimestre dentro de la serie histórica.

Debilitamiento a finales del año

En tasa interanual, el PIB del cuarto trimestre creció un 2,6%, lo que supone 2,1 puntos menos que en el trimestre precedente (4,7%), debido, sobre todo, a una menor aportación de la demanda interna. En concreto, la contribución de la demanda nacional al crecimiento del PIB interanual fue de 0,9 puntos, 1,9 puntos menos que en el tercer trimestre de 2022, en tanto que la demanda externa contribuyó con 1,7 puntos, dos décimas menos.

El consumo de los hogares moderó su crecimiento interanual más de dos puntos en el cuarto trimestre, hasta el 2,7%, su menor alza desde el primer trimestre de 2021, mientras que el gasto público aumentó un 2,3% tras cuatro trimestres en negativo. La inversión, por contra, desaceleró su crecimiento casi 4 puntos, hasta el 2,4%, registrando su menor repunte desde el cuarto trimestre de 2021. Por su parte, las exportaciones se incrementaron un 6,9% interanual en el cuarto trimestre del año pasado, la mitad que en el tercer trimestre, en tanto que las importaciones moderaron su crecimiento interanual más de seis puntos, hasta el 2,4%.

368.000 empleos creados en 2022

El empleo, en términos de horas trabajadas, bajó un 0,1% en el cuarto trimestre respecto al trimestre anterior, una décima menos que en el trimestre anterior. En términos interanuales, el número de horas efectivamente trabajadas moderó su crecimiento cinco décimas, hasta el 2,7%. Por su parte, los puestos equivalentes a tiempo completo se incrementaron un 2% interanual, ocho décimas menos que en el tercer trimestre, lo que supone que en un año se han creado 386.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo.

La productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo registró un avance interanual del 0,6%, frente al crecimiento del 1,9% del tercer trimestre, mientras que la productividad aparente por hora efectivamente trabajada disminuyó un 0,1%, frente al repunte del 1,5% del tercer trimestre de 2022. El crecimiento interanual del coste laboral por unidad de producto (CLU) se situó en el 3,2%, tasa 1,9 puntos inferior a la variación experimentada por el deflactor implícito de la economía (+5,1%).