El conseller de Empresa de la Generalitat, Miquel Sàmper, dijo que Catalunya, que el año que viene presidirá la Alianza Europea de Regiones de Semiconductores, quiere "liderar" esta industria a nivel europeo, por lo que debe "dar un salto" hacia la fabricación de chips. "Cataluña está muy preparada para todo lo que es la fase de diseño y de prefabricación y ahora tenemos muy claro que tenemos que dar un salto hacia la fabricación de los chips (...) en un momento geopolítico como el actual", afirmó Sàmper en declaraciones a la prensa, tras mantener en Bruselas una reunión con la Alianza.

El conseller subrayó que tras la vuelta al poder del presidente estadounidense, Donald Trump, "ha quedado muy claro" que "Europa tiene que ser independiente y tiene que tener autonomía", un objetivo al que Catalunya quiere "aportar al resto del Estado y al resto del continente europeo". "Para Catalunya es estratégico", dada la relevancia que los semiconductores tienen a nivel industrial, dijo Sàmper.

En este sentido, recordó que la Generalitat ha presentado ya una estrategia política para impulsar a la industria de los chips y ha creado una alianza con más de 250 actores, desde universidades a centros tecnológicos y de investigación. Aseguró también que el Govern ha identificado ya localidades en las que crear nuevas fábricas de semiconductores, así como a inversores catalanes, europeos y extracomunitarios interesados, a pesar de que "es evidente" de que serán necesarios fondos europeos porque, según dijo la implantación de una factoría de chips tiene un coste de 20.000 millones de euros.

Sàmper auguró "un año importante para Catalunya", coincidiendo con la presidencia de la Alianza Europea de Regiones de Semiconductores, una organización que agrupa a 35 territorios europeos, que aportará su visión en la revisión que la Comisión Europea realizará el año que viene de la ley de chips que la UE aprobó en 2022.

Una norma que tiene el objetivo de lograr que la UE fabrique en 2030 el 20% de los chips en todo el mundo, pero que, según Sàmper, difícilmente se alcanzará con el ritmo actual.