Las cumbres de las montañas rocosas que rodean el valle de Jackson Hole (Wyoming) volverán a ser protagonistas desde este jueves con la habitual presencia de los principales bancos centrales, encabezados por el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, que ejerce de anfitrión en el cónclave anual que se celebra desde 1982 y que en esta edición centra su interés en la figura del banquero central estadounidense bajo las presiones de Donald Trump.
Bajo el lema Mercados laborales en transición: demográfica, productividad y política macroeconómica, los mercados estarán pendientes de cualquier pista sobre las próximas decisiones de la Reserva Federal, que tendrá su primera reunión de política monetaria el próximo 17 de septiembre. En esta edición cobra particular interés la intervención de Jerome Powell agendada para el viernes, cuando se espera que el banquero central estadounidense ofrezca alguna pista sobre la evolución de los tipos de interés en EE. UU. después de los últimos datos de empleo e inflación en el país, con un panorama algo más claro sobre los aranceles y en medio de los constantes ataques personales por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Christine Lagarde intervendrá el sábado
Otro de los platos fuertes de esta edición será la intervención el sábado de Christine Lagarde, ausente el año pasado. En la última reunión de política monetaria del Banco Central Europeo, celebrada el 24 de julio, la institución mantuvo sin cambios los tipos de interés. Volverá a reunirse el próximo 11 de septiembre. De este modo, los banqueros centrales de los dos principales bloques económicos occidentales volverán a coincidir por primera vez desde que a principios de julio, en Sintra y con el BCE como anfitrión, Lagarde aprovechase para defender públicamente la labor de Powell al frente de la Fed.
Desde 1978, el Banco de la Reserva Federal de Kansas City ha patrocinado un simposio para abordar los problemas a los que deben hacer frente las economías de Estados Unidos y el resto del mundo. A partir de 1982, dicho cónclave se celebra en Jackson Lake Lodge, dentro del Parque Nacional Grand Teton (Wyoming).
Actas de la Fed
El cónclave de Jackson Hole arrancará unas horas después de conocerse las actas de la última reunión de la Fed. La mayor parte del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal de Estados Unidos consideró más urgente atender los riesgos que emanan del lado de la inflación que los provenientes del mercado laboral, motivo por el que se optó por mantener los tipos de interés en el rango objetivo del 4,25% al 4,50% en la reunión del 30 de julio. Los integrantes del órgano rector admitieron que tener una inflación por encima del 2% y un mercado laboral en ralentización, aunque aún "sólido", suponía un problema, pero la "mayoría" coincidió en que los riesgos inflacionistas eran más acuciantes.
El diagnóstico del conjunto del FOMC contrasta con el expresado entonces por la nueva vicepresidenta del área de supervisión, Michelle Bowman, y Christopher Waller, que abogaron por un recorte en los tipos de un cuarto de punto. Adriana Kugler se ausentó de la votación y poco después se comunicó su dimisión.
Estas discrepancias son reseñables dado que se enmarcan en la guerra abierta entre el presidente de la Fed, Jerome Powell, y Donald Trump, que insiste en bajar a toda costa el precio del dinero. Cabe recordar que Bowman fue nominada para su cargo actual por el mandatario, mientras que Waller figura en las quinielas para liderar la Fed cuando expire el mandato de Powell en 2026.