Agricultores y ganaderos españoles participará en una protesta el próximo 18 de diciembre en Bruselas para exigir un "cambio radical" en los presupuestos europeos destinados al sector agrícola.
El campo español reclama que Europa necesita "políticas fuertes y comunes", con un presupuesto creciente, que permitan al sector afrontar los retos de futuro, que pasan por alimentar a la población en un contexto de emergencia climática y de incertidumbre geopolítica, pero las propuestas presupuestarias y políticas de la Comisión Europea, presidida por Ursula Von Der Leyen, "no permitirán afrontar esos retos".
La protesta se suma al movimiento de organizaciones agrarias europeas que se han dado cita en Bruselas. En España está convocada por el COPA-Cogeca, organización de la que forma parte UPA, que aportará una delegación representativa de los diferentes territorios y sectores de la agricultura y la ganadería española, encabezada por su secretario general, Cristóbal Cano.
Se espera que miles de agricultores y ganaderos de toda Europa, unos 10.000 según UPA, muestren su rechazo a la propuesta de la Comisión Europea del marco financiero plurianual 2028-2034 y a la reforma de la Política Agraria Común (PAC).
Una rebaja presupuestaria del 30%
Entre otras decisiones, la Comisión ha propuesto una rebaja estimada del presupuesto de la PAC entre un 20% y un 30%, pasando de 386.000 a 300.000 millones de euros, lo que UPA ha considerado "un paso más en un proceso de adelgazamiento del presupuesto de ayudas al campo que comenzó en los años 80 del pasado siglo".
UPA ha recordado que en los últimos 40 años, la PAC ha pasado de suponer el 73,2% en 1980 a cerca del 24,6% en 2023. Con el nuevo presupuesto ese porcentaje se quedaría en torno al 20%.
El pasado mes de mayo, UPA ya organizó una protesta ante la sede de la UE en Madrid para exigir una PAC fuerte y con presupuesto, pero ahora trasladará su descontento a Bruselas con la exigencia de una "PAC sólida, común y bien financiada para después de 2027".
También reclaman normas comerciales "justas y transparentes" que protejan los estándares de la UE y los sectores más sensibles y una simplificación burocrática real, con mejor regulación y seguridad jurídica.