Esta semana Juan Carlos de Borbón -todavía fuera de España- ha intentado regularizar su situación con el fisco. Ha pagado unos 600.000 euros en concepto de lo que le debía a Hacienda. Lo que no tenemos muy claro, es en base a qué. Tampoco tenemos muy claro de qué se trata y de dónde viene ese dinero que ha estado utilizando -supuestamente- y que estaría en distintas cuentas en el extranjero. Nos falta mucha información, pero en cualquier caso lo que nos queda claro es que tres años después, el rey Juan Carlos intenta escurrir el bulto y normalizar una situación. A nadie se le escapa que ningún otro ciudadano en España podría tener las mismas ventajas y los mismos miramientos que el monarca. Ante esta situación, hay quien ha dicho ya que no somos todos iguales ante la ley. Algo obvio.