Cuatro años se cumplen hoy de una evidencia: el 1 de octubre fue de democracia. Y como parecen señalar los hechos, en España, lo que suene a participación, a reclamo de la ciudadanía y a un espacio de reflexión, no encaja. Y no lo hace si no está tutelado por el establishment. Una muestra más de que la democracia solo se construye ejercitándola.