Tanto los ordenadores portátiles como los de sobremesa cuentan con pantallas capacitadas para ofrecer rendimientos excepcionales y, sin embargo, su potencia puede verse mermada por algo tan sencillo como una marca de dedos o una capa de polvo. Para evitarlo y conseguir que tu pantalla muestre las imágenes como cuando la compraste te vamos a dar unos cuantos consejos.

En este artículo te vamos a recomendar un puñado de materiales de limpieza para que puedas limpiar la pantalla de tu ordenador del modo más económico posible. Y además te comentaremos unos pocos trucos útiles para limpiar tu monitor sin dañarlo en ningún momento.

Primer paso: prepara tu kit de limpieza

A la hora de limpiar la pantalla de cualquier ordenador puedes optar por dos opciones: la especializada o la casera. Por especializada nos referimos a los muchos kits específicos de limpieza para ordenadores que colman el mercado. Estos packs suelen venir con una gamuza especial para limpiar pantallas sin producir daños y una solución limpiadora, normalmente en spray, que suelen ofrecer buenos resultados.

Sin embargo, el sentido común nos dice que podemos aprovechar muchos de los utensilios y productos de limpieza que usamos en casa para limpiar la pantalla de nuestro equipo. La buena noticia es que son algo más baratos y que te van a dar el mismo resultado que un producto específico si los usas como es debido.

Hablamos simplemente de una gamuza atrapapolvo, un paño de microfibra y alcohol isopropílico de 90% o más. Te recomendamos este tipo de alcohol porque es un producto que jamás va a dañar los componentes del ordenador. El paño de microfibra conseguirá el mismo efecto: dejar reluciente la pantalla pero evitando al mismo tiempo rayaduras o desperfectos.

Evita usar otros paños de cualquier tejido y también pañuelos o servilletas de papel ya que ambas alternativas pueden rayar la pantalla y dejar residuos adicionales mientras la limpiamos. Del mismo modo es desaconsejable utilizar tanta agua, porque puede dejar manchas blancas en la pantalla, y también limpiacristales porque contienen amoniaco que puede dañar nuestro ordenador.

Paños de microfibra
Paños de microfibra / Pixabay

Así debes limpiar la pantalla de tu portátil u ordenador de sobremesa

Antes de ponerte manos a la obra con la limpieza de tu equipo lo absolutamente recomendable es apagarlo para evitar sorpresas desagradables. Y tras apagarlo debes esperar unos cinco o seis minutos hasta que el equipo se enfríe.

A continuación, toma la gamuza atrapapolvo y asegúrate de repasar a fondo todos los marcos y las zonas de conexiones y puertos. Es justo en esos puntos donde el polvo se suele acumular y puede llegar a lastrar el funcionamiento del equipo.

Una vez hayas limpiado marcos, base y conexiones, puedes comenzar con la limpieza de la pantalla. Para esto te va a ser de gran utilidad el paño de microfibra y el alcohol. Humedece el paño con el alcohol, escurrirlo bien y frota la pantalla con esmero, pero sin apretar tanto como para que puedas dañar la pantalla.

En este punto, te recomendamos que frotes la pantalla siempre en la misma dirección y evitando los movimientos circulares. Es el mejor modo de evitar ralladuras durante el proceso de limpieza. Además, nunca debes aplicar el líquido limpiador directamente contra la pantalla.

Una vez hayas terminado de limpiar la pantalla, debes dejarla secar durante unos minutos antes de volver a enchufar el dispositivo y encenderlo.