El cultivo de pescado lleva haciéndose durante décadas en todo el mundo. Es una práctica conocida como acuicultura o piscicultura. Se trata de criar peces en ambientes controlados como estanques, jaulas flotantes en lagos, ríos o el mar, así como tanques artificiales. De este modo, se asegura su crecimiento hasta un tamaño apto para el consumo o repoblamiento.
Para practicar la acuicultura o piscicultura se requiere de agua de buena calidad cuya temperatura, oxígeno y pH estén constantemente controlados. También se debe alimentar a los peces de manera adecuada, además de disponer de un sistema para gestionar los desechos y prevenir las enfermedades. Si bien el coste inicial de construcción de las instalaciones es alto, cuando el sistema está bien diseñado no solo se obtiene una producción constante, sino también un uso eficiente del agua y el espacio.
Las especies que se cultivan varían mucho dependiendo de la región y la demanda. Algunas de las más comunes son las carpas y barbos, así como la Tilapia (el pez más abundante y uno de los más fáciles de reproducir). El salmón también se encuentra entre ellos por su popularidad en todo el mundo, y por eso China ha creado el primer barco de cultivo de salmón del planeta.
El barco producirá 8.000 toneladas de salmón al año
No hay día que pase sin que llegue alguna noticia innovadora de China. El país asiático estaría ultimando los detalles de su barco Su Hai No 1, el primero del mundo dedicado al cultivo de salmón en alta mar. El objetivo de la embarcación es reducir significativamente la dependencia de China del salmón importado al poder cultivarlo a gran escala.
Según South China Morning Post, el buque mide 250 metros y fue construido en el astillero Huangpu Wenchong de Cantón con un coste de 600 millones de yuanes (73 millones de euros). Como avanzábamos, se espera que pueda producir hasta 8.000 toneladas de salmón al año, y se espera que esté listo para junio. El pasado mes de abril se puso a prueba en un viaje que completó con éxito.
El barco presenta dos ventajas clave respecto a los métodos existentes, como reubicarse rápidamente para evitar peligros como tifones y flotaciones de algas nocivas, garantizando la seguridad del salmón, algo que no siempre es posible con los sistemas de red estacionarios. Por otro lado, cuenta con instalaciones para procesar el salmón directamente en el barco, permitiendo su entrega fresca a los mercados nacionales en tan solo 24 horas.
Al parecer, más del 80% del consumo de salmón de China depende de las importaciones de Noruega y Chile. En 2024, el país asiático importó más de 100 mil toneladas de salmón. Se cree que dicha cifra podría duplicarse y superar las 200 mil toneladas para 2030. Transportar el salmón del Atlántico tiene altos costes logísticos y ambientales, por lo que el nuevo barco chino sería más sostenible con el medioambiente.