Los castillos y similares siempre han fascinado a la infancia y, por eso, las fortalezas, de cualquier forma y manera, van a volver a ser uno de los regalos que protagonizarán gran número de cartas a los Reyes Magos. Antaño, y además de los clásicos castillos de Playmobil hoy todavía disponibles, existía otra opción que era, además, mucho más interesante, porque permitía construir fortalezas formidables con pequeños ladrillos de plástico que encajaban unos en otros y hasta parecían hechos de auténtico mármol. Nos referimos, claro a Exin Castillos, una marca perdida en el recuerdo que tuvo su primera muerte en 1993, con la bancarrota de Exin, revivió a finales de los 90 de la mano de Popular de Juguetes y volvió a desaparecer en 2005 cuando esta empresa cerró puertas. Ahora, en pleno 2022, el legado sigue vivo gracias a NG Castillos, una empresa creada en 2014 que nació con la idea de proporcionar a coleccionistas y constructores de Exin Castillos piezas de alta calidad que nada tienen que envidiar a las de Exin.
Los castillos de siempre
NG Castillos tiene al frente a Quim Arumí, que empezó este proyecto convencido de que lo que hoy es NG Castillos no es solo un jueguete, sino una afición capaz de unir delante de unos pequeños ladrillos de plástico a padres, hijos y abuelos. “A los más pequeños les fascina poder crear los mundos que imaginan, pero también hay algunos adultos que son capaces de construir auténticas obras de arte”. Sus castillos, de hecho, son para los más mayores un regreso a la infancia y para los pequeños, una llave a otra manera de jugar que no precisa de pantallas y, quién sabe, quizá también una puerta a una vocación futura.
Orgullosos de su trabajo
En la marca, están especialmente orgullosos de poder ofrecer hoy un producto, para muchos olvidado,pero que vuelve a llegar a las jugueterías con la misma calidad de siempre y que, además, tiene otros usos: “Para nosotros es un auténtico orgullo poder fabricar, diseñar y vender este maravilloso juguete. Es un sueño hecho realidad y, por eso, apostamos por la calidad y el buen diseño: no queremos bajar el listón como, por desgracia, lo bajó en su día Popular de Juguetes cuando hace ya unos años lo retomó. Hoy, ellos ya no están y nuestra referencia, por supuesto, es Exin, la empresa que inició esta aventura en los años 60. Nos gusta lo que hacemos y, por lo que dicen quienes confían en nosotros, lo hacemos bien. Nuestros castillos se compran para muchos niños y niñas, pero también se los autorregalan adultos con años de experiencia entre piezas como las nuestras que, de nuestra mano, tienen la oportunidad de disfrutar de una afición sana y creativa que relaja y hace feliz a quien la practica”.