¿Cómo pretende compensar Endesa el desastre económico que para As Pontes de García Rodríguez y su comarca va a suponer el cierre de la central térmica que funciona en la localidad desde 1976? De momento, hablan de proyectos eólicos, programas de formación y un programa de “captación de inversiones” que podría concretarse en la instalación de hasta dos fábricas en terrenos de la central.

Vinculados a Alcoa
Los proyectos de energía eólica previstos, indica Endesa, estarán vinculados al tejido industrial de la zona y, así, serán (según la compañía) “decisivos para reactivar el complejo industrial de Alcoa en Lugo”. Cabe recordar que Alcoa ha cerrado ya las plantas que tenía en Avilés y La Coruña y mantiene otra en San Ciprián, Lugo en la que la producción de aluminio debe retomarse en los próximos meses. La crisis de Alcoa, en parte, se vincula al carácter electrointensivo de la industria del aluminio y se espera que, de la mano de los proyectos eólicos que quiere impulsar Endesa, se abarate el precio de la electricidad que se usará en la planta lucense.
¿Reindustrialización?
Al tiempo, Endesa señala que ha conseguido ya la “implicación “ del grupo chino Sentury Tire –dedicado a la producción de neumáticos- y de la papelera Ence para instalar dos plantas industriales en terrenos de la central. La fábrica de Ence, declarada por la Xunta como proyecto estratégico, se dedicaría al reciclado de papel y cartón, con los que se quiere producir fibra blanqueada y biomateriales. Endesa también ha indicado que formará hasta a 130 personas de la zona para que se empleen en estos proyectos. En otras localidades (La Robla, Andorra y Velilla del Río Carrión) que acogían térmicas de carbón que han cerrado y han sido desmanteladas en su práctica totalidad se han anunciado también diferentes proyectos. De momento, en As Pontes, lo único que tienen es un lago donde andes había una mina a cielo abierto que alimentaba de lignito la central y un listado de buenas intenciones. Más o menos lo mismo (aunque sin lago) que tienen en Velilla, La Robla y Teruel. Bueno, eso y, también, ejemplos como los de Cercs o Barruelo de Santullán, pueblos en los que el cierre de las minas del carbón dio paso a la nada.