Tomás Pardo, condenado por una violación y ahora investigado por otro asalto exactamente igual al que actuó secuestrando, violando y apuñalando a la víctima, está ahora en la prisión Modelo de Barcelona "bajo vigilancia constante", según informan a El Nacional fuentes judiciales.

Hoy el juez ha decretado prisión sin fianza después de que se haya negado a declarar. Pardo cometió el ataque durante un permiso penitenciario de tres días.

Desde 2013 el juez ha denegado los permisos hasta 13 veces. Pero Serveis Penitenciaris dieron por su cuenta al preso permisos para salir de la prisión durante 48 horas para atender a cuestiones familiares. Este año, Serveis Penitenciaris, que dependen del Departament de Justícia, recurrieron al juez de la Audiencia de Barcelona la denegación de los permisos y finalmente se autorizó la primera salida de prisión el mes de julio. En septiembre hubo una segunda salida. Y la última fue la de este pasado fin de semana que acabó con el secuestro, violación y agresión de una mujer de 52 años en el mismo lugar donde hace 14 años atacó a su primera víctima.

Fuentes de Presons no entienden cómo no saltaron las alarmas cuando el recluso utilizaba los permisos para volver a su entorno habitual, ya que ello supone un riesgo de reincidencia.

Según han explicado fuentes de los Serveis Penitenciaris a El Nacional, "la evolución era positiva" y "la conducta era imprevisible, pero nada indicaba que podía reincidir". Por este motivo, fuentes del Departament de Justícia explican que se recurrió la decisión del juez que da los permisos penitenciarios después de que los denegara hasta 13 veces y por eso el mismo Departament de Justícia, utilizando sus competencias, dio los 18 permisos de 48 horas al preso.

Revisando el caso

Fuentes del Departament insisten en que "se está haciendo un análisis exhaustivo" del caso y "que haya fracasado el proceso de reinserción con este interno no significa que el sistema no funcione".

Las mismas fuentes indican que fue "el juez quien tomó la decisión de autorizar la salida con total independencia". Pero el TSJC argumenta que la tuvo que autorizar después de que le llegara la orden del Audiencia de Barcelona que aceptó el recurso de Justícia.

Justícia insiste en que la evolución de Tomás Pardo "era buena y favorable" y que todos los estudios indican que las salidas progresivas facilitan la reinserción. Actualmente un 6% de los agresores sexuales son reincidentes, y según Justícia, los violadores son una pequeña parte.

El Departament insiste que los equipos de tratamiento de tres centros penitenciarios dieron informes positivos para que Pardo pudiera obtener los permisos y que formaba parte de los talleres de prevención de agresores sexuales como testigo y explicaba su experiencia al resto de reclusos. Y que incluso se había puesto en el lugar de la víctima.