La mujer que esta madrugada ha muerto estrangulada en manos de su pareja vivía en un piso patera junto con el agresor. Era una vivienda de 140 metros cuadrados y con 5 habitaciones que ocupaban una quincena de personas ―todas ellas latinoamericanas― que pagaban 100 euros al mes por una cama con derecho a cocina y lavabo.

El propietario, según explican algunos vecinos, es un hombre de origen chino que lo compró hace 12 años a una vecina del barrio que estaba harta de la degradación de la zona, que en aquella época, en el 2007, sufría el fenómeno de la sobreocupación de pisos.

El inmueble está situado en la calle Solsona del barrio de la Salut de Badalona y si bien es cierto que la situación del vecindario no tiene nada que ver con la de hace 10 años atrás, el bloque donde ha pasado el crimen, ha estado rodeado de polémica. Según los vecinos, se ha ocupado, tapiado y vuelto a ocupar en varias ocasiones y el jaleo y las peleas son constantes. A juzgar por las imágenes de la escalera, podrían vivir personas que recogen chatarra.

Edgar, un chico de origen guatemalteco -―como la víctima y el agresor―, comparte piso con la pareja. Explica que como mínimo hace más de 6 meses que vivían en la casa y que nunca había escuchado peleas. "Se llevaban muy bien", ha dicho el joven que también ha reconocido haber trabajado con el agresor: "La semana pasada me fui a hacer de albañil con él a una obra. Yo los conocía como 'don Fermín' y 'doña Francisca'", ha relatado.

Su versión contrasta con la de una vecina, menor de edad, que asegura que el agresor lo asediaba y le hacía comentarios como "qué buena estás, por qué no me das un beso". La chica afirma que el hombre "bebía alcohol y fumaba marihuana".

Jordi Pérez, propietario del bar Lucena, justo junto al lugar del crimen, explica que es un bloque "ocupado" en el cual "hay mucho movimiento". "La gente cambia cada dos por tres. Nunca son los mismos", asegura.

El hombre se ha entregado a la policía

El presunto autor del crimen machista se ha entregado esta madrugada en las dependencias de la Guardia Urbana, que se encuentran junto al domicilio de la víctima.

Cuando los agentes y los servicios sanitarios se han desplazado al lugar de los hechos han encontrado a la mujer muerta y estirada en el suelo.

Los Mossos han abierto una investigación y el juzgado número 2 de Badalona continúa con las diligencias.

El Ayuntamiento de la ciudad ha decretado dos días de duelo y ha hecho un minuto de silencio.