Continúa al retorno progresivo a las aulas. Las universidades catalanas empezarán el curso 2021-2022 con un máximo del 70% de presencialidad, de acuerdo con el Plan Sectorial de universidades que ha aprobado el Procicat. Una estrategia que se mantendrá "siempre que la evolución de la pandemia lo permita", según ha informado este lunes al Departament de Recerca i Universitats.

Será responsabilidad de cada universidad concretar las medidas necesarias para dar cumplimiento a este tope de aforo. Mientras que las actividades docentes universitarias, las prácticas y las evaluaciones seguirán siendo presenciales, las universidades podrán flexibilizar y desarrollar en formato virtual las actividades académicas, de formación continua o dirigidas a profesionales. En esta línea, se recomienda que las reuniones se hagan de manera telemática, sobre todo en aquellos casos que exista un desplazamiento.

La mascarilla, obligatoria

Se habilita la presencialidad llena en el ámbito de la investigación y la transferencia, en los laboratorios y en los servicios de soporte y administración, siempre que se cumplan los aforos vigentes en cada momento. Es decir, todas las actividades se tendrán que hacer respetando las medidas higienicosanitarias y las distancias de seguridad.

A pesar de la relajación, la mascarilla seguirá siendo obligatoria en cualquier espacio interior donde se lleven a cabo las actividades docentes, así como en espacios de trabajo de uso público o abiertos al público. La prohibición de beber directamente de las fuentes de agua se mantiene y se recuerda la necesidad de tener contenedores específicos para mascarillas, guantes o cualquier otro residuo derivado de las medidas de protección individual.

Promoción de salud mental

El plan insiste en que las universidades muevan ficha en la promoción de la salud y de apoyo emocional entre sus colectivos para frenar y prevenir los efectos contra que la pandemia tiene sobre la salud emocional y social.

Recuerda que es muy importante una buena ventilación en los espacios cerrados. Es necesario ventilar las aulas y estancias desde que llegan los estudiantes, durante la actividad lectiva y al final de la jornada, momento en que habrá que abrir todas las ventanas y las puertas de las aulas como mínimo media hora.

Pasillo de la Universidat de Barcelona vacío durante las nuevas restricciones / ACN

Es la primera vez que la presencialidad supera la virtualidad desde el inicio del curso pasado, que empezó de manera presencial, pero en octubre se decretó que toda la docencia tenía que ser virtual. Sólo las prácticas y las evaluaciones se mantuvieron presenciales. En febrero se introdujo la presencialidad restringida al primer curso de los grados, hasta llegar a acabar el curso con el 50% de presencialidad.

Las medidas que prevé el plan son de aplicación para el conjunto de la comunidad universitaria (estudiantes, personal al servicio de la universidad, Personal Docente Investigador y Personal de Administración y Servicios) y, en general, para todas las personas que accedan a las instalaciones de una universidad.

 

Imagen principal: Clase presencial en la Universidat Autònoma de Barcelona durante el curso 2020-2021 / ACN