Una huelga de controladores aéreos en Francia amenaza miles de vuelos programados en Europa este viernes que pasan por encima de territorio francés. El paro, convocado durante 24 horas a todo el país galo, empezará a las 6 de la mañana del viernes y se alargará hasta las 6 del sábado. La dirección general de aviación civil francesa ha avisado de que el tráfico aéreo se verá "fuertemente perturbado" en todos los aeropuertos de Francia, donde se generarán "retrasos significativos". Por su parte, Aena ha informado de que hay un total de 6.000 operaciones de la red, 280 de las cuales son con origen o destino en Francia, y que, de momento, solo constan 32 cancelaciones. Sin embargo, el gestor aeroportuario ha asegurado que "podrán verse afectados otros vuelos que sobrevuelen el espacio aéreo francés" porque las autoridades galas calculan que se quedarán en el suelo un 50% de las operaciones.

La protesta de los controladores ha generado críticas de algunas operadoras, como es el caso de la compañía de bajo coste Ryanair, la cual ha reclamado a la Unión Europea que tome medidas con el fin de proteger los trayectos que sobrevuelan territorio francés y se pueden ver afectados. En el caso de la compañía aérea irlandesa, la huelga obligará a cancelar 420 vuelos que contaban con un total de 80.000 pasajeros, a los cuales ya se les ha informado de la situación. La empresa ha asegurado que ve "inexplicable" que los vuelos que sobrevuelen Francia se vean "perturbados" por la huelga, mientras que los trayectos domésticos franceses "están protegidos por las leyes de servicios mínimos". Es por eso que Ryanair ha reclamado que también se garanticen los sobrevuelos en territorio galo y que se permita que los controladores aéreos europeos sean los encargados de gestionarlos mientras dura la movilización en Francia.

Ryanair, que actualmente está involucrada en un conflicto laboral con el Estado español por la negociación del convenio de sus trabajadores, ha calificado de "injustificada" la protesta de los controladores aéreos de Francia, una huelga convocada por el sindicato mayoritario de los controladores aéreos franceses SNCTA para protestar la falta de mecanismos para compensar la inflación y la falta de planificación de renovación de plantilla, ante el aviso que en la próxima década se jubilarán 1.200 trabajadores.

Los controladores aéreos franceses ya protagonizaron una huelga en 2018 que afectó distintos vuelos que salían desde Barcelona. En esa ocasión, Vueling fue una de las compañías con más afectación, la cual según Willie Walsh, responsable de International Consolidated Airlines Group (IAG), grupo formado por British Airways (BA), Iberia, Vueling y Aer Lingus, incurrió "en un coste adicional de incidencias de 20 millones de euros en el trimestre".