La verbena de Sant Joan, que se celebra este viernes, siempre es un día complicado en las carreteras y este año no se espera que sea diferente. Con el fin de evitar retenciones kilométricas, el Servicio Catalán de Tráfico (SCT) ha decidido abrir, por primera vez, un carril adicional en la AP-7 Norte entre Montornès del Vallès y Sils—de 53 km en dirección Girona— que estará operativo a partir de las 15 horas de este viernes. En la misma vía, pero en dirección sur, entre Barcelona y Gélida, se establecerá un límite de 80 km/h. Además, durante todo el fin de semana se mantiene la obligatoriedad de circular por el carril derecho en vehículos pesados en algunos tramos de la AP-7, así como otras limitaciones de velocidad y adelantamientos.

El director del SCT, Ramon Lamiel, ha señalado que este jueves salieron del área metropolitana de Barcelona 38.000 vehículos más con respecto al 2022, un hecho que puede aliviar un poco el tráfico que se espera este viernes. En declaraciones en RAC1, Lamiel ha indicado que es importante que los conductores que tengan que salir por la AP-7 busquen vías alternativas y así poder hacer balanceo entre las diversas vías catalanas. Además, con respecto a los camiones, Lamiel ha explicado que este año han avisado a las autoridades francesas que es Sant Joan para poder avisar en los conductores que se encontrarán más restricciones de las habituales.

460.000 vehículos saldrán del AMB

El SCT prevé que hasta 460.000 vehículos salgan del área metropolitana de Barcelona entre las 15:00 horas de este viernes y las 15:00 horas del sábado. En este sentido, el Departamento de Interior ya prevé que tanto la AP-7 como otras vías que conectan con destinos costeros volverán a ser las que concentran más volumen de vehículos. El carril adicional de la AP-7 estará controlado por vuelos de helicóptero y patrullaje de los Mossos d'Esquadra.

Por otra parte, la operación retorno del domingo 25 de junio se espera entre las 12 h y las 24 h y se calcula que unos 260.000 vehículos se movilizarán hacia la zona de influencia de la capital catalana. Ante esta previsión, se instalarán más de 100 km de carriles adicionales en sentido contrario en el habitual en la AP-7 norte entre Sant Celoni y Montornès del Vallès, en la AP-7/B-23 entre Vilafranca y Molins de Rei y a la C-32 norte entre Sant Andreu de Llavaneres y Montgat y a la C-32 sur entre Gavà y Cornellà de Llobregat, para aumentar la capacidad viaria de estas vías y tramos.

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Dispositivo especial por Sant Joan

El conseller d'Interior, Joan Ignasi Elena, ha detallado que se activarán de forma extraordinaria 2.506 agentes de los Mossos d'Esquadra, cerca de un centenar más que el año pasado. Aparte, los Bombers de la Generalitat y los Agents Rurals activarán un dispositivo de casi 1.000 personas, y el 112 reforzará al personal operador y de supervisión con hasta 110 profesionales trabajando al mismo tiempo. En el caso del cuerpo de Mossos, el titular de Interior ha detallado que se prevé que lleven a cabo más de 700 controles viarios en las zonas con mayor número de desplazamientos y en los núcleos urbanos. El dispositivo se dedicará prioritariamente al control de la ubicación de las hogueras y el uso de material pirotécnico con el fin de comprobar que se cumple con las restricciones.

Además, el dispositivo desplegado por Interior también contempla un incremento de la vigilancia y control de espacios con grandes aglomeraciones de personas, con el fin de combatir la indisciplina viaria, evitar aquellas actividades que puedan causar incendios, y trabajar en la prevención de los delitos sexuales. Por otra parte, la Dirección General de Coordinación de las Policías Locales calcula que cerca de 2.000 agentes formarán parte también del dispositivo de Sant Joan, un 75% más que un viernes ordinario.

Prevención ante el riesgo de incendio

Con respecto al riesgo de incendios, Interior advierte que hay lugares donde "se tiene que ser especialmente prudente", como es el caso del Alt y Baix Empordà, el interior del Ebre, y los litorales de Tarragona y Barcelona. Ante eso, Interior mantiene igual que otros años las restricciones al fuego y petardos y, por lo tanto, no se podrán encender hogueras ni tirar petardos a menos de 500 metros de zonas boscosas. Asimismo, el departamento ha recomendado a los ayuntamientos que habiliten y delimiten espacios para poder tirar petardos.