El restaurante Sant Pau de Tokio, de Carme Ruscalleda, cerrará el próximo 2 de septiembre después de 19 anys- abrió el mes de abril de 2004. El cierre lo han anunciado a través de un puesto de Instagram publicado en la cuenta oficial del restaurante, donde han dejado la puerta abierta a una futura colaboración con Ruscalleda e indican que "quizás" sorprenderán con algunos nuevos retos conjuntos. Según apunta el comunicado, el establecimiento que se encuentra en el hotel The Kitano se despedirá con un menú degustación especial a partir del 1 de junio y hasta el día del cierre, que incluirá algunos de los platos más míticos del restaurante que han marcado la trayectoria de la cocinera con más estrellas Michelin del mundo.
Un restaurante con dos estrellas Michelin
El Sant Pau de Tokio es propiedad del empresario Yuji Shimoyama, pero estaba dirigido por la chef catalana, que llegó a tener dos estrellas Michelín— aún conserva una—en su primera ubicación, situado en un pequeño palacio en el barrio de Nibonbashi y vivió momentos complicados cuando estalló la pandemia del coronavirus.
Los 19 años de Ruscalleda en Tokio es gracias a la insistencia que tuvo el empresario nipón Yuji Shimoyama, que buscó a ella y a su marido, Toni Balam, para proponerles abrir una sucursal de su restaurante Sant Pau de Sant Pol de Mar en la capital del país nipón después de haber quedado impresionados con el toque de Ruscalleda. Aunque se lo pensó, la cocinera catalana aceptó la oferta y acabó sorprendiéndose de la población japonesa y su respeto por los ingredientes y los platos que ella preparaba. Uno de los motivos que ha motivado el cierre del restaurante, según ha afirmado la cocinera en declaraciones en El Periódico son las razones económicas relacionadas con el traslado del Sant Pau en el hotel The Kitano.
El restaurante triestrellado de Carme Ruscalleda en Sant Pol, después de 30 años de historia, también cerró en septiembre de 2018. A pesar de que, su hijo Raül Balam lo reabrió el año 2022 con una nueva propuesta más informal, pero manteniendo el alma del Sant Pau original.